Valladolid tiene restaurante con la totalidad de sus platos aptos para celiacos

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Valladolid.- Croquetas, torreznos, bocadillos o pan. Alimentos prohibidos para cualquier intolerante al gluten, que siempre selecciona con cuidado la comida que le ofrecen los restaurantes, pero algo cambió. Desde el 13 de febrero, Valladolid alberga uno de los escasos locales a nivel nacional que cuenta con la totalidad de sus platos aptos para los celiacos; el restaurante Caroba. Un lugar donde cualquier intolerante a los derivados del trigo, la avena o el centeno pueda disfrutar de todos los alimentos, sin la necesidad de hacer una selección de la carta o sin el miedo a una posible ‘contaminación cruzada’ de la comida. Es una iniciativa que facilita el salir a comer fuera de casa sin preocupaciones y sin discriminar con los alimentos. En la mañana de ayer dieron testigo de este hecho el propietario del restaurante Caroba, Alfonso Carlos Manzano García, la presidenta de la Asociación de Celiacos de Castilla y León, Patricia García Egido, y el presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de Valladolid, José Jaime Fernández Lafuente.

El restaurante ya ofrecía a sus clientes una carta en la que se señalaban aquellos alimentos que eran aptos para celiacos. Desde hace seis años habían cambiado el estilo hacia una «cocina mediterránea», eliminando ciertos componentes con gluten del menú, pero con la última reforma del restaurante, su propietario decidió darle una vuelta de tuerca al asunto y apostó por «adaptar todos los alimentos de la carta».

Uno de los inconvenientes que se plantearon en un principio fue la de una posible subida en el precio de los platos al elaborarlos con materias sin gluten -de mayor coste que el resto- pero el propietario confirmó que el precio será «prácticamente el mismo que antes» y que aplican métodos para la rebaja de estos precios como la manufacturación propia del pan, por ejemplo. «El precio no excede al anterior menú», aseguró Alfonso Carlos García Manzano. Desde el restaurante se muestran muy positivos con la apuesta por ofrecer alimentos aptos para celiacos en su totalidad, ya que la iniciativa surge de la visita de muchos clientes que eran intolerantes al gluten.

Esta innovadora propuesta es pionera a nivel nacional, ya que, según el propietario, solo conoce «cuatro o cinco restaurantes de este tipo en Barcelona y uno en Gijón». Sin embargo, son los únicos de toda la comunidad de Castilla y León. Esto lo defendió rotundamente también la presidenta de la Asociación de Celiacos de Castilla y León al señalar que se trata de «un paso hacia delante». La aparición de un restaurante de estas características facilita que se pueda «comer y tapear con total seguridad», algo que no es posible -todavía- en la inmensa mayoría de restaurantes o bares del país. Además, la importancia de un local de estas características en Valladolid, tal como refrendó el presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería, da «un punto más a la ciudad como referencia gastronómica».

Compromiso
La concienciación del restaurante Caroba con los intolerantes al gluten es total, pero no se quedan ahí, ya que su oferta también ofrece alimentos para veganos, vegetarianos e intolerantes a la lactosa. Las posibilidades del menú ofrece una variedad que logrará conseguir más de un quebradero de cabeza a los celiacos, pero esta vez por el hecho de decidir qué van a elegir del repertorio, y no por descartar aquello que su organismo no les permite.

El propietario del restaurante Caroba, Alfonso Carlos Manzano García, finalizó la presentación con una muestra de algunos ejemplos de lo que el cliente se puede encontrar en la carta: desde unas «croquetas de gorgonzola», unas «tostas con cecina de León y tomate», un «timbal de huevos rotos con hongos y trufa», pasando por un «arroz con bogavante caldoso» hasta una variedad de postres como el «semifrío de fruta de la pasión» o un «brownie de chocolate negro con avellanas y helado de romero», entre las diferentes posibilidades que presenta el menú. Las puertas están abiertas para todos.

Fuente: http://www.eldiadevalladolid.com/