¿Qué es el turismo espacial?
Ya no nos conformamos con coger el coche o el avión e ir a un destino u otro. Nuestras necesidades y sobre todo las de algunas empresas parecen ir más allá y hablan de un turismo espacial, que pese a que ahora es algo previsto en la lejanía, parece que sus pasos para poner turistas en el espacio cada vez son más grandes.
El turismo espacial es un desarrollo como nunca antes visto en la industria de los viajes y el turismo. Un estilo de turismo futurista o la perspectiva de poder pasar tiempo de ocio en el espacio es un concepto emocionante para muchos, aunque genera miedos en otros.
Pero aunque algunos sólo esperaban poder experimentar el turismo espacial mediante un software de realidad virtual, varias empresas están convirtiendo las vacaciones en el espacio en una realidad.
Y es que, en la actualidad, no sólo se da importancia a los viajes espaciales con fines de investigación, sino que se está poniendo empeño en su explotación comercial, con fines turísticos y de ocio.
Dado que el turismo espacial es extremadamente caro, se trata de un segmento muy pequeño de consumidores que pueden y están dispuestos a comprar una experiencia espacial.
¿Qué es el turismo espacial?
El turismo espacial es un tipo de turismo que implica un interés por el espacio. Aunque la mayoría de la gente asocia el turismo espacial únicamente con viajar al espacio, el concepto es, de hecho, mucho más amplio.
Y es que este puede incluir también la visita a museos centrados en el espacio, la observación de lanzamientos de cohetes o los viajes a destinos populares para la observación de estrellas, entre otras actividades relacionadas con este entorno.
Sin embargo, últimamente se ha prestado mucha atención comercial al concepto de viajar al espacio como turista.
En la actualidad, en el sector del turismo espacial sólo están disponibles comercialmente para los turistas los vuelos de caza de gran altitud y los vuelos atmosféricos en gravedad cero, pero la batalla por lograr grandes éxitos está siendo encarnizada por muchas empresas, que poco a poco van dando pequeños pasos.
Breve historia del turismo espacial
Si el turismo espacial no se ha iniciado antes, ha sido debido a la fuerza económica de las dos principales potencias, Estados Unidos y la URSS, que no veían esta rama como una fuente de ingresos y sí de gastos.
Afortunadamente para los potenciales turistas espaciales, el fin de la Guerra Fría, la construcción de la ISS (Estación Espacial Internacional) y, sobre todo, la posibilidad de llevar al espacio a más personas de las esperadas en una aeronave, abrieron la puerta a este tipo de ocio.
La tripulación que pasaría a la historia en 2001 por llevar al primer turista espacial fue la del magnate norteamericano y ex ingeniero de la NASA, Dennis Tito, el primer ser humano que viajó al espacio sólo por placer y pagando, por lo que se considera un turista.
A pesar del elevado precio del “billete”, ya que hablamos de que pagó 20 millones de dólares la permanencia en la lista de espera es larga, sobre todo porque la plaza no siempre está disponible, aun así, varios turistas han seguido al norteamericano en su viaje, todos ellos hasta ahora con la empresa Space Adventures.
Es a raíz de esto cuando docenas de empresas entraron en esta industria con la esperanza de capitalizar el renovado interés del público por el espacio.
En la década de 2000, los turistas espaciales se limitaban a lanzamientos a bordo de aviones rusos Soyuz y sólo podían ir a la ISS. Sin embargo, todo cambió cuando los demás actores empezaron a crecer en el mercado. Ahora hay una gran variedad de destinos y empresas para viajar al espacio.
Principales empresas del sector. ¿Cuánto cuesta que una persona vaya al espacio?
Desde hace casi quince años, muchas empresas y organizaciones colaboran en proyectos para enviar personas de la calle al espacio.
En la actualidad hay 20 empresas centradas en el turismo espacial, quizá las más conocidas sean:
• Virgin Galactic: una de las empresas de turismo espacial más conocidas, propiedad del multimillonario Richard Branson.
• Blue Origin: con un cohete tradicional de despegue vertical, la empresa planea comenzar a operar pronto, aunque aún no hay una fecha firme.
• SpaceX: sus primeras vacaciones estaban previstas inicialmente para 2018, pero se han retrasado.
• Boeing: ha desarrollado una cápsula para la tripulación, denominada Boeing CST-100 Starliner, que le ofrece la oportunidad de vender asientos a los turistas espaciales.
• Axiom Space: organiza las llamadas misiones de “astronautas privados” a la ISS, que incluyen semanas de entrenamiento e itinerarios personalizados basados en los objetivos de quienes son lo suficientemente ricos para pagar el viaje.
• Space Perspective: ha innovado desarrollando cápsulas de lujo para turismo espacial. Iniciará con 25 vuelos en 2024, los cuales ya están reservados en su totalidad.
Mientras las dos primeras se centran en vuelos suborbitales, es decir, que abandonan la atmósfera, a unos 100 km de altura, Axiom y Boeing trabajan en misiones orbitales, mucho más costosas.
SpaceX, por su parte, prioriza el turismo lunar en el futuro. Por ahora, la empresa de Elon Musk ha permitido que su nave Dragon Crew sea fletada para realizar vuelos orbitales, como ocurrió con la misión de tres días Inspiration4 que se lanzó en septiembre de 2021 integrada por 4 civiles.
Space Perspective, por su parte, está desarrollando otro sistema basado en globos para llevar a los clientes a la estratosfera y tiene previsto iniciar sus vuelos comerciales en 2024.
Ahora bien, si hablamos de precios, estos son los estipulados por algunas de las grandes empresas antes comentadas:
• Virgin Galactic: 250.000 dólares por un vuelo suborbital de 2 horas a una altitud de 80 km.
• Blue Origin: unos 300.000 dólares por un vuelo suborbital de 12 minutos a 100 km de altura.
• Axiom Space: 55 millones de dólares por un vuelo orbital de 10 días.
• Space Perspective: 125.000 dólares por un vuelo de 6 horas al borde del espacio (32 km sobre la Tierra).
El precio depende, pero recuerda que los vuelos espaciales suborbitales son siempre más baratos.
Virgin Galactic, por ejemplo, ya cuenta con una amplia lista de espera de viajeros espaciales ansiosos, entre los que se encuentran Brad Pitt, Angelina Jolie, Leonardo DiCaprio o Justin Bieber.
¿Es seguro? ¿Merece la pena el turismo espacial?
Ha habido algunas preocupaciones sobre la seguridad del turismo espacial, sobre todo después de la publicidad negativa que rodea el accidente de la aeronave de Virgin Galactic en 2014.
Dado que el desarrollo de la industria del turismo espacial es tan nuevo y que la Administración Federal de Aviación no puede controlar el diseño y la fabricación de las aeronaves por parte de las empresas privadas, es difícil determinar la seguridad de nuestras futuras vacaciones en el espacio.
Además hay ciertos sectores, como el medio ambiental, que están altamente en contra por la contaminación que se podría llegar a generar, además de las voces que hablan de que la tasa de muerte entre los turistas va a ser elevada. Si a esto le sumamos el número de accidentes ocurridos durante las fases de prueba, tampoco ha contribuido a tranquilizar a la gente.
Por otro lado, como ya hemos visto, los precios van desde los 250.000 dólares hasta decenas de millones de dólares. Por el momento, los viajes de turismo espacial serán de corta duración, de tan sólo unas horas. Sin embargo, la intención es que los viajes puedan ampliarse en el futuro para permitir estancias prolongadas en el espacio.
Como puede ver, la industria del turismo espacial es una parte importante de la industria turística en general. Aunque la mayor parte de la atención se centra en la emocionante perspectiva de las vacaciones de turismo espacial, resulta algo todavía bastante alejado de la realidad.
Es probable que veamos muchos avances en la industria del turismo espacial en los próximos años, ya que varios operadores comerciales siguen investigando y desarrollando, así que solo queda esperar.
Quién sabe si dentro de 50 veranos nuestras vacaciones sean por otros planetas y no Benidorm. Y vale, no va a ser sencillo, eso es cierto. Habrá que adaptarse a pasar un tiempo en gravedad cero, es posible que te marees un poco al viajar y que no vuelvas a casa con el mismo bronceado, pero parece que las vacaciones de turismo espacial van a hacerse realidad tarde o temprano.
Fuente: https://computerhoy.com/