Provincias siguen amenazadas por el cólera ante la contaminación de ríos, arroyos y canales

Faustino Ureña tiene que recorrer ahora más de 8 kilómetros, tres veces al día, para monitorear las redes del acueducto del municipio de Pedernales, con la finalidad de evitar que la bacteria del cólera infecte el agua que consume la población.

Esa labor de ir, desde el tanque de almacenamiento del acueducto hasta la planta de tratamiento, se ha vuelto común en las últimas semanas para Ureña y también para los demás ingenieros encargados de los sistemas de agua potable en las comunidades fronterizas.

Y es que ocho provincias limítrofes con Haití siguen en peligro de ser afectadas por la epidemia del cólera debido sobre todo a la contaminación de al menos tres de sus ríos más importantes, y por el deterioro de algunos de sus acueductos.

Más del 50% de los casos de cólera registrados en el país ocurrió en comunidades de la zona fronteriza. Una investigación reveló que el 60% de los infectados en el país contrajo la enfermedad al consumir agua no tratada de los ríos, canales y arroyos o al bañarse en ellos. El informe del Ministerio de Salud Pública indica que el 65% de los afectados son hombres que están en contacto con aguas debido a sus labores agrícolas.

En Pedernales, por ejemplo, el acueducto se abastece de un río que divide a Haití con este lado del país y es normal que en ese acuífero los haitianos se bañen, laven sus ropas, mitiguen su sed y hasta la de sus animales de crianza.

Igual sucede con el río Masacre que surte el acueducto de Dajabón. Allí el peligro está en bañarse y utilizar el agua directamente, por lo demás contaminada tras la muerte de un haitiano a causa de la enfermedad del cólera justo en la ribera sur de Juana Méndez.

El riesgo está ahora en comunidades por donde corren esas aguas contaminadas, cuyos habitantes están obligados a consumirlas. En San Juan de la Maguana, donde 34 personas fueron infectadas en el 2010 y lo que va de este año, el río San Juan que abastece el acueducto de esa demarcación está entre los tres más contaminados. Los otros dos son el Masacre y el Artibonito que también bañan la frontera del lado haitiano.

Frente a la amenaza fue preciso que Salud Pública y el Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (INAPA) arreciaran las acciones de vigilancia para evitar que siga creciendo el número de afectados en San Juan de la Maguana.

Mientras que en Barahona y en el resto de la región Enriquillo, se mantiene un monitoreo de los sistemas de agua potable a fin de disipar en la ciudadanía cualquier temor con respecto al líquido que llega a sus hogares.

“No hay porqué preocuparse, los acueductos de la región Enriquillo están vigilados y controlados, por lo que los residentes de las provincias Pedernales, Independencia, Barahona y Bahoruco pueden consumirla sin temor”, asegura Felipe Sisa Brito, encargado del Acueducto Regional Múltiple del Suroeste (ASURO).

Este sistema suministra agua apta para el consumo a más del 80% de Barahona, Bahoruco e Independencia. Sisa Brito dice que este acueducto, el más moderno de la región, es de excelente calidad, cuya alimentación proviene del río Yaque del Sur, pero se le aplica cloro desde la toma misma, la cual va a la planta de tratamiento y, ya en ella, se clorífica nuevamente.

Atención

La mayor vigilancia de las autoridades se produce en Jimaní, donde el agua llega con niveles débiles de cloro.

Sin embargo, a juicio de Oscar de la Cruz, como allí existe un acueducto que se alimenta desde un río que proviene de Haití, entonces se le aplica cloro antes de su distribución y así se cumple con los estándares requeridos.

“Hay una coordinación con los ayuntamientos de las comunidades, sobre todo en lo que tiene que ver con la recogida de basura y la acumulación de agua, cuando se limpian los tanques, y hay que recoger los desperdicios”, dice De La Cruz.

Entretanto, Rafael Salas Ubiera, director provincial de Salud Pública en Dajabón, asevera que pese a que una de las fuentes de abastecimiento del acueducto de allí es el Masacre, el agua es manejada de forma adecuada en la plata de tratamiento.

Confirma la versión Juan Manuel Cardero, administrador del INAPA en esta provincia, quien dice que antes se le aplicaba una proporción de cloro de 0.5, pero actualmente y por disposición del ministro de Salud, Bautista Rojas Gómez, la cantidad fue aumentada a 1.5; más la aplicación de sulfato de aluminio para eliminar la impureza del agua.

Otras acciones de prevención se ejecutan en San Juan de la Maguana. Tanto Héctor Guerrero, director provincial de Salud, como Bolívar Matos, director regional, destacaron que ya han visitado 28,000 viviendas, distribuyeron 20,000 folletos informativos e impartieron 25 talleres sobre el cólera, a fin de orientar a la población en relación a esa enfermedad.

Allí se han unido todos los sectores para desarrollar un plan educativo sobre el problema; aún más instlaron una máquina de elaboración de cloro para producir 100 galones diarios que serán distribuidos a la población.

Casos de cólera

El peligro se advierte debido al hecho de que en el vecino Haití la epidemia del cólera ha causado más de 3,600 muertes y ha infectado a 17,304 almas. Mientras que en el país, sumados los casos del pasado año con los de éste, ya se registran 173 infectados del cólera, enfermdedad que se manifiesta con infección gastrointestinal provocada por el contacto con una bacteria, cuyos síntomas son diarrea abundante, dolor de barriga y vomito.

Por lo pronto, Salud Pública informó que solo en el municipio cabecera de Dajabón se registraron 8 casos de cólera, 4 de los cuales fueron detectados en vivienda donde laboraban trabajadoras domésticas que diariamente venían del vecino país de Haití.

Las autoridades sanitarias en coordinación con el Cesfront prohibieron el cruce diario hacia República Dominicana de trabajadoras haitianas y el baño de personas en el río Masacre, como parte de las medidas para prevenir la enfermedad que ha causado estrago en la vecina nación haitiana.

Sin embargo, se aseguró que desde el 31 de diciembre del año pasado no ha habido ningún caso de la enfermedad en el municipio de Dajabón, lo que indica que la población está acatando en gran medida las recomendaciones de emitidas por Salud Pública.

Medidas de prevención

Salud Pública prohibió bañarse en el río Masacre, el cruce diario hacia República Dominicana de trabajadoras domésticas procedentes de Haití, además prohibió la venta de alimentos cocidos en el mercado binacional que se realiza los lunes y los viernes en Dajabón.

Mantiene, además, el lavado de manos y chequeos médicos en los puntos fronterizos a las personas que legalmente entran al país desde Haití, y mantienen las corchas impregnadas de cloro y otras sustancias en los puentes fronterizos.

Sin embargo, en Elías Piña la situación de los acueductos es más precaria. Las propias autoridades de Salud confirmaron que en los poblados Guaroa y Pinzón sus sistemas de abastecimiento de agua potable estaban contaminados. Allí la necesdiad de mejorar el suministro del líquido es vital para que no se rompa la fragilidad del cinturón sanitario.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

*