Primer avión militar hipersónico aparece en Atlanta y es espectacular
Hermeus acaba de presentar una maqueta a escala real de su nuevo avión hipersónico: el Quarterhorse. La compañía cuenta con 60 millones de presupuesto para poner el avión en el aire y ya ha mostrado el primer paso de lo que podría ser un sistema que cambie por completo nuestra forma de viajar, pero también nuestra forma de entender la guerra.
Los aviones ultrarápidos están de moda. Después del accidente del Concorde que paró en seco la fabricación de este tipo de naves, varias compañías están apostando por recuperarlas. Aquí ya hemos hablado de algunos diseños de aviones y motores hipersónicos que prometen cubrir la distancia entre Madrid y Nueva York en solo media hora, pero el Quarterhorse es uno de los que más adelantados está.
Hermeus tiene un contrato para ponerlo en marcha por 60 millones, no es mucho teniendo en cuenta que proyectos similares como el Blackbird SR-71 costaron cuatro veces más. Con ese dinero la compañía se compromete a tener tres aviones listos en un plazo de menos de tres años, aunque la primera fase de diseño y prototipo ya está completada.
Lo habitual cuando se trabaja en un nuevo modelo de avión es presentar una maqueta a escala que demuestre que el diseño que se ha aprobado sobre el papel funciona en el mundo real. Pero Hermeus ha decidido impresionar a sus inversores —entre los que están la Fuerza Aérea de los EE.UU. y varios grupos privados de capital riesgo— con un modelo a escala real al que le han colocado su motor hipersónico.
“Cuando una empresa aeroespacial presenta un nuevo avión, no es más que espuma de poliestireno y fibra de vidrio”, comenta Skyler Shuford, director de operaciones de Hermeus. “Pero en Hermeus, manejamos productos integrados. Y nos gusta mucho, mucho, hacer fuego”.
Según Shuford, la maqueta es para ellos mucho más que una pieza de exposición sino un ejercicio de diseño multidisciplinar. “Diseñamos, fabricamos e integramos el avión a partir de nada más que su forma exterior, en cuatro meses”, afirma Shuford.
Hermeus ya ha probado con éxito su prototipo de motor hipersónico. Se trata de un motor de ciclo combinado basado en turbinas (TBCC), inspirado en el turborreactor GE J85, igual que el que utilizan el avión portador White Knight de Virgin Galactic o el XB-1 de Boom Supersonic.
Los motores TBBC utilizan un turborreactor convencional para acelerar a una velocidad lo suficientemente alta como para que el motor de reacción se encienda cuando la nave alcanza la velocidad hipersónica. La dificultad de este diseño está en conseguir que este turborreactor mantenga esa velocidad y no produzca resistencia cuando el avión está en modo supersónico o hipersónico.
Según la compañía, el sistema de propulsión del Quarterhorse es reutilizable y será capaz de acelerar el avión hasta unos 6.174 km/h, esto es cinco veces la velocidad del sonido (Mach 5). A esta velocidad se podría ir de Madrid a Nueva York en solo 90 minutos, en lugar de las siete horas que emplean habitualmente las aerolíneas comerciales.
El Quarterhorse de Hermeus —una compañía con base en Atlanta y que cuenta entre sus fundadores a antiguos empleados de SpaceX y Blue Origin— probablemente acabe teniendo uso militar y comercial, si es que finalmente se llega a construir. Este prototipo no parece contar con cabina ni espacio para pasajeros así que lo más probable es que se trate de un dron como el SR-71.
Hermeus ha llegado también a un acuerdo con la NASA hace unos meses para ayudarles a investigar y desarrollar nuevos aviones hipersónicos. Según el CEO de de la compañía, AJ Piplica: “si bien esta asociación con la Fuerza Aérea de los Estados Unidos subraya el interés del Departamento de Defensa en los aviones hipersónicos, cuando se combina con la asociación de Hermeus con la Nasa anunciada en febrero de 2021, está claro que hay aplicaciones tanto comerciales como de defensa para lo que estamos construyendo”.
Fuente: https://www.elconfidencial.com/