¿Por qué los humanos no tienen cola? La extraña respuesta de la ciencia
Desde que se observaban los clásicos esquemas de la evolución de los humanos a través de la prehistoria, había algo que llamaba la atención y esto es que, incluso los simios de los que descendemos no tienen cola, algo que ha desatado la intranquilidad en la comunidad científica, misma que recientemente hizo un estudio que reveló la verdad detrás de esta incógnita.
Pues, aunque algunos investigadores sostenían que, posiblemente el desprendimiento de la cola por parte de los humanos fue una paulatina consecuencia de su condición de caminar sobre dos pies, lo cierto es que, según datos recientes, queda demostrado que primero los primates de los que provenimos se desprendieron de la cola para después caminar erguidos.
Lo anterior porque este cambio físico posiblemente hizo que su postura cambiara como forma de adaptación a su nueva anatomía, pero ¿por qué los humanos ya no tenemos cola?
Esta es la razón por la que los humanos se desprendieron de la cola característica de los primates
De acuerdo con una reciente investigación publicada en la revista Nature, los hominoides, que incluyen a los humanos y los simios perdieron su cola externa durante la evolución. Eso ocurrió aproximadamente hace 25 millones de años, cuando su linaje se separó de los antiguos monos del Viejo Mundo, dejando solo de 3 a 5 vértebras caudales para formar el coxis en los humanos modernos. Y todo esto se debió a un elemento “saltarín” en las secuencias de ADN de estos primates,
Según lo expuesto por el líder de la investigación, Bo Xia, antiguo estudiante de posgrado de la Universidad de Nueva York y ahora investigador principal del Instituto Broad, hubo una variación genética que hizo que algunos ejemplares perdieran el gen precursor de la columna vertebral provocando así la pérdida de la cola en los homínidos.
Según los científicos, los dos elementos Alu, en el gen TBXT, que están presentes en los grandes simios, pero no en los monos fueron los que “se saltaron” en la cadena genética provocando la variación fenotípica.
Al respecto, National Geographic España apunta que, la investigación fue validada mediante experimentos en ratones, sobre los cuales se utilizó la tecnología de edición genética CRISPR para insertar los elementos Alu en el gen TBXT de embriones de ratón.
Esto da como resultado que las nuevas crías mostraran una reducción significativa en la longitud de la cola, “lo que sugiere que aunque el elemento Alu es un factor importante en la pérdida de la cola, podrían existir otras mutaciones que contribuyan a este rasgo distintivo de los primates, incluidos los humanos”.
Fuente: https://www.eltiempo.com/
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