Países eurozona logran éxito en crisis de deuda en una semana clave
Los países de la eurozona bajo sospecha por sus altos déficits han logrado superar con éxito una semana clave en la evolución de la crisis de deuda al demostrar que pueden seguir financiándose en el mercado, aunque sea a costa de aumentar los intereses de sus bonos.Con las nuevas medidas contra la crisis que ha anunciado Bruselas como telón de fondo, lo que ha aliviado las presiones sobre los Estados con problemas, Grecia, Portugal, España e Italia han logrado a lo largo de la semana alcanzar los objetivos máximos de sus respectivas subastas, lo que de momento disipa el temor al contagio de las turbulencias.
El resultado de esta relativa mejora, ya que los problemas de déficit y deuda que han generado la crisis siguen sin solucionarse, aunque los países advertidos ya están en camino de reducirlos, ha sido un descenso en las primas de riesgo de todos ellos y un repunte en las Bolsas, muy castigadas hasta la fecha. En el caso de España, la sobrereacción de los inversores a los planes de Bruselas y el éxito cosechado en las subastas de bonos ha cambiado la tendencia negativa que arrastraba el selectivo Ibex 35 desde principios de año. Los avances de esta semana se han traducido en un repunte del 4,8% en lo que va de año. A la espera del cierre de hoy, en las últimas tres sesiones, sobre todo tras la euforia desatada ayeren los mercados financieros, cuando el parqué madrileño subió un 5,4%, se ha revalorizado en un 10%.
En los mercados secundarios de deuda, donde se intercambian los bonos de los países una vez emitidos y que son la referencia para analizar la evolución de las tensiones desatadas tras el descalabro de Grecia hace poco más de un año, la presión sobre los llamados países periféricos ha regresado a los niveles de mediados de diciembre. Así, Laprima de riesgo española, que es el diferencial entre los tipos de los bonos a 10 años y los alemanes, de referencia, se reducía en unos cinco puntos básicos frente al nivel de ayer hasta los 235, en línea con los recortes en las primas de sus compañeros en el grupo de cola del euro.
España ha logrado hoy colocar el máximo previsto de bonos en su primera subasta de deuda del año, aunque a costa de subir el precio a su nivel más alto desde julio de 2008 . En concreto, el Tesoro ha vendido títulos a 5 años por 2.999 millones frente a un objetivo de entre 2.000 a 3.000 millones a un tipo marginal, el último antes de cortar la emisión, del 4,590%, casi un punto más que el 3,6% que pagó hace dos meses.
Animados por esta rentabilidad, los compradores han respondido a la subasta solicitando más del doble de los títulos emitidos con 6.307,91 millones de euros pese a lo exigido que ha estado el mercado estos días. El volumen solicitado equivale a una ratio de cobertura, relación entre los bonos pedidos y los vendidos, de 2,1 veces. En la pasada operación a cinco años de noviembre, la demanda fue menor, con una ratio de 1,6 veces.
Los inversores, que llevan tres jornadas aprovechando el alivio en los mercados de deuda para volver a entrar en los valores españoles, han celebrado el resultado de la subasta aumentando sus compras en el Ibex, lo que ha impulsado las subidas de primera hora. A las 13.30, el selectivo español Ibex 35 avanzaba un 2,7% y superaba ampliamente los 10.300 puntos gracias al tirón del sector bancario, que tiene más peso en la Bolsa española frente a los otros parqués de referencia europeos. De hecho, en el resto de Europa, se empezaban a ver algunas caídas por la recogida de los beneficios acumulados en las sesiones anteriores.
Italia también ha acudido hoy al mercado, aunque en su caso se trataba de la segunda emisión del año. En esta ocasión, el Tesoro italiano ha subastado bonos a 5 y 15 años por 6.000 millones de euros con una rentabilidad mayor de la registrada en las últimas subastas de este tipo de deuda pública. En concreto, un interés del 3,67% a cinco años, superior al 3,24% de la última operación a los mismos plazos realizada en noviembre. En los títulos con vencimiento en 2025, el tipo que ha tenido que pagar para superar las dudas de los inversores ha sido del 5,06%, 25 décimas sobre la subasta anterior. La demanda ha superado la oferta en 1,4 veces.