Ollanta Humala reniega de la Constitución actual y afirmó que honrará la anterior a Fujimori
Lima.- Ollanta Humala, un militar retirado de 49 años, se convirtió desde ayer en el primer presidente de izquierda de Perú en casi cuatro décadas con el compromiso de “acabar con el lacerante rostro de la pobreza” y sorprendió al declarar que honrará el “espíritu” de una Constitución que no está vigente.“Declaro ante el Congreso, ante los presidentes amigos aquí reunidos y ante el pueblo peruano que fiel al mandato de las urnas y en pleno respeto al estado de derecho, dedicaré mi energía a sentar las bases para que borremos definitivamente de nuestra historia el lacerante rostro de la exclusión y la pobreza construyendo un Perú para todos”, dijo Humala en sus primeras palabras como mandatario.
Humala juró en la sede del Congreso ante el presidente del Legislativo, Daniel Abugattás, y frente a una docena de mandatarios extranjeros, la gran mayoría de ellos sudamericanos. “Juro por la patria que ejerceré fielmente el cargo de presidente de la República por el periodo 2011-2016”, declaró el flamante mandatario, quien recibió la banda de parte de Abugattás.
Humala generó la primera polémica de su mandato al afirmar que honrará “el espíritu, los principios y los valores de la Constitución de 1979”, que es anterior a la Carta Magna de 1993 y que es la vigente en el Perú. La Constitución de 1979 es la que simboliza el regreso a la democracia en Perú después de una serie de dictaduras. La de 1993, en cambio, fue promulgada por el presidente autócrata Alberto Fujimori, actualmente en prisión por violación a los derechos humanos y corrupción.
La mención de Humala causó la protesta de la bancada fujimorista, primera fuerza opositora del Congreso peruano. “Fue una provocación”, dijo tras la ceremonia el congresista Kenji Fujimori, hijo del ex mandatario. “Tenemos un presidente de facto y por lo tanto no le debemos ningún respeto”, dijo la congresista fujimorista Martha Chávez.
Al hablar de economía, Humala anunció un alza inmediata de 12.5% del salario mínimo y otro 12.5% a comienzo de 2012, una promesa de campaña que de antemano había generado preocupación en las élites empresarias del país.
“No vengo en son de guerra sino en son de paz, sin venganza sin rencor”, expresó Humala. “A los que aún persisten en el encono les pido que bajen sus espadas y sus lanzas y a los que demandan salarios y derechos les digo que no bajen su bandera pero que sepan que todo cambio para ser sostenible debe ser gradual y racional”, dijo al finalizar su mensaje.
A la ceremonia no asistió el presidente saliente Alan García, quien entregó la banda presidencial en el Palacio de Gobierno y se despidió allí de sus ministros y allegados.
Una hora después, Humala se trasladó a Palacio de Gobierno donde juramentó a sus 18 ministros. Como presidente del consejo de ministros juró Salomón Lerner su más cercano colaborador, y en Economía el liberal ortodoxo Luis Miguel Castilla. Su nuevo canciller es el intelectual de izquierda Rafael Roncagliolo.