MSC y su agresiva gestión para posicionarse como la línea naviera número 1 del mundo

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Tras 50 años, MSC propiedad de empresario italiano Gianluigi Aponte, que la fundó hace medio siglo, está a punto de coronarse como la mayor línea naviera del mundo, superando a Maersk. El grupo familiar, que ha fichado a uno de los principales ejecutivos de su competidor danés- Soren Toft- y ha permitido que una persona ajena a la empresa asuma por primera vez un papel de liderazgo, pretende consolidar su posición en el centro de las cadenas de suministro mundiales, reporta Financial Times.

“Creo que es una oportunidad perfecta para unir lo mejor de los dos mundos”, declaró al Financial Times Soren Toft, que se incorporó como CEO de MSC en diciembre, tras 25 años de permanencia en Maersk. “Se trata de tomar mis experiencias, mis percepciones y mi previsión y combinarlas con los grandes atributos de MSC, somos de propiedad privada y tenemos una mirada larga”.

Toft, llegó en el momento oportuno para hacer crecer el grupo italo-suizo, que se ha embarcado en una agresiva expansión, aprovechando la pandemia que ha proporcionado beneficios récord a las navieras gracias al incremento de los fletes provocado en gran medida por el auge del e-commerce.

La rentable racha de las navieras se produce tras más de una década de exceso de capacidad que ha obligado a la consolidación y a las alianzas para compartir la capacidad. Y aunque Toft insiste en que “no nos preocupa el tamaño”, la línea naviera ha comprado unos 60 buques de segunda mano desde agosto, y ha encargado 43 nuevos, según Alphaliner, en una muestra de su oportunismo.

MSC suele ser muy reservada, pero los ingresos anuales del grupo superaban probablemente los US$25.000 millones antes de la pandemia, ya que está llamada a crecer más que su rival Maersk en términos de capacidad, con el mayor portafolio de pedidos de nuevo tonelaje.

Toft, descrito como ambicioso, racional e impaciente por sus allegados, tendrá que encontrar un equilibrio entre su deseo de dejar huella y seguir la línea del multimillonario propietario y su familia. Los Aponte han mantenido un estrecho control sobre la toma de decisiones y la cultura de la empresa durante décadas, a medida que ésta se expandía más allá del transporte de bienes, hacia los cruceros, las terminales, la logística interior, la seguridad y otras áreas.

El fundador y antiguo capitán de ferry napolitano también ha conservado el sentimiento de familia marítima en el grupo, ganándose la lealtad de sus más de 100.000 empleados, incluso enviando cartas personalizadas al personal para invitarles a las ceremonias de bautizo de los buques, dicen personas familiarizadas con la empresa.

Fuente: https://www.mundomaritimo.cl/