Mitos y verdades sobre la llegada del hombre a la Luna

Hacia principios de 1970, una cadena de noticias norteamericana transmitió un programa televisivo acerca de la Misión Apolo 11 que llevó por primera vez a la humanidad hacia la luna. La producción, cuenta la Agencia Espacial Norteamericana NASA, se llamó “Teoría de la conspiración: ¿Aterrizamos en la Luna?” y cuestionaba el trabajo de la agencia espacial sobre el alunizaje bajo la premisa de que “la tecnología de NASA en los sesentas no estaba lo suficientemente desarrollada como para realizar un alunizaje”.

Por el contrario, el programa televisivo suponía que toda la misión había sido montada en un estudio de cine y que se trataba tan solo de un metraje más de Hollywood o una farsa para distraer a la Unión Soviética durante la denominada Guerra Fría; dice NASA. Descubre otros mitos (ahora desmentidos) que rodean uno de los avances más importantes en la carrera espacial de todos los tiempos.

No hay estrellas en las fotografías de las Misiones Apolo ¿Montaje?

Dice NASA que una de las principales Fake News divulgadas por el canal de noticias norteamericano rondaba acerca de la ausencia de estrellas en las fotografías capturadas por Neil Armstrong, Michael Collins y Buzz Aldrin en la Misión Apolo 11. “Un claro error de producción ¿Olvidaron prender las constelaciones?”, bromea la agencia. Lejos de ser un mito, la falta de estrellas en las fotos del hombre en la luna se debe a una simple razón.

Capturar la imagen de un objeto muy brillante sobre un fondo oscuro es muy difícil. Por lo tanto, aquel astronauta que haya capturado las imágenes tuvo que decidir entre ajustar la exposición de la cámara sobre el blanco traje espacial (reflejado por el sol y por el suelo lunar) u oscurecer la luz para así resplandecer el paisaje lunar junto a sus estrellas y planetas.

Objetos que los astronautas dejaron en la Luna

Los astronautas de la Misión Apolo regresaron a la Tierra habiendo recolectado un total de 382 kilogramos de rocas lunares, cuenta NASA en un artículo acerca de los objetos abandonados por los astronautas de la misión en el satélite espacial. Estas rocas fueron supervisadas por los científicos de la Agencia para determinar su contenido molecular, determinando que carecían de agua en su interior y los minerales arcillosos comunes en la Tierra no existen allí; dicen los expertos de NASA.

Sin embargo, existe una serie de elementos que los astronautas dejaron a propósito en el suelo lunar para así recordar el paso del hombre por tierras extraterrestres. Entre cientos de ellos, la Agencia Norteamericana destaca los siguientes:

• La bandera de los Estados Unidos de América.

• Reflectores de 2 pies (0.6 metros) con cien espejos que apuntan a la Tierra. Estos espejos pueden ser reflejados con

un laser desde el planeta para así medir la distancia que hay entre el satélite y la Tierra.

• Una huella en forma de bota hecha por Neil Armstrong.

• Pelotas de golf utilizadas por el astronauta Alan Shepard.

• Tres Rovers (vehículos espaciales) de la NASA para conducir en la Luna.

• La placa conmemorativa que dice “Aquí hombres del planeta Tierra pusieron por primera vez un pie en la Luna en julio de 1969. Vinimos en son de paz representando a toda la humanidad”.

¿Por qué la bandera de los Estados Unidos flameaba?

He aquí otro mito. Las banderas del Apolo se muestran ondeando y doblándose en las fotografías ¿Por qué? En la Luna no hay brisa, cuestiona la NASA. Como si se tratase de el armado de una tienda de campaña, los astronautas giraban y pisaban con fuerza alrededor del parante que sostenía la bandera. De tal modo que ésta se sujetara bien al suelo y no cayera. Este ejercicio, dice la Agencia Norteamericana, provocaba que la bandera se moviera sin cesar: “Desplegar un pedazo de tela con gran ímpetu terminará probablemente en ondas y dobleces ¡sin necesidad de brisa!”.

¿Se puede ver la bandera de Estados Unidos desde la Tierra?

Nada como mirar hacia el cielo por la noche, descubrir que la Luna se encuentra en su fase llena y observar a simple vista sus cráteres. Según la NASA, los cráteres de la Luna que tienen unos 100 kilómetros de diámetro pueden ser vistos por el ojo humano directamente desde la Tierra. Sin embargo, otros, más pequeños, deben ser capturados por telescopios y otros dispositivos dedicados.

Las banderas plantadas en la superficie lunar no se pueden ver mirando desde la Tierra. Aunque NASA dice que tienen la tecnología suficiente para ver la última bandera que quedó allí plantada con la llegada del Apolo 17. En total, se plantaron seis banderas entre las misiones de 1969 a 1972.

De todas formas, es posible ver la superficie de la Luna de las siguientes maneras, según indica NASA:

• Un par de binoculares ordinarios permite que los ojos humanos vean cráteres en la Luna de hasta 10 kilómetros de tamaño;

• Algunos cráteres de tan solo 1 kilómetro de diámetro se pueden ver con la ayuda de un telescopio básico para principiantes;

• Los cráteres que miden 100 metros de diámetro solo pueden ser vistos por el Telescopio Espacial Hubble;

• Finalmente, la sonda “Lunar Reconnaissance Orbiter” puede observar objetos de un metro de diámetro y así ver l sombra que produce la bandera norteamericana.

La aparición de un ‘OVNI’ en la misión Apolo 16

La NASA realizó 22 misiones Apolo, de las cuales solo seis llegaron a la Luna. Entre ellas estaba la Misión Apolo 16, que regresó de su viaje lunar un 27 de abril de 1972 con el registro de un objeto volador no identificado (OVNI) flotando en las afueras del espacio exterior durante cuatro segundos. El video había sido capturado por los astronautas John Young, Thomas Mattingly y Charles Duke desde una de las ventanas del transbordador.

De acuerdo con NASA, este OVNI fue descripto como “un objeto en forma de platillo con una cúpula en la parte superior” que aparecía momentáneamente cercano a la Luna y se perdía de vista cuando la cámara retrocedía y se alejaba de su campo de visión. Es por esto que la propia agencia norteamericana llevó a cabo una investigación para desclasificar el objeto.

Al utilizar una remasterización en alta calidad del metraje, el Centro Espacial Lyndon B. Johnson a cargo de NASA estabilizó las imágenes con mayor contraste y demostró que el OVNI era en realidad un reflejo provocado por el reflector/boom EVA, una herramienta anclada al módulo de mando que se utiliza para facilitar la caminata espacial en la Luna.

Fuente: https://www.nationalgeographicla.com/


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