Maersk presenta resultados decepcionantes y admite “tiempos difíciles”
La fiesta de las navieras parece estar llegando a su fin, según los resultados que se están conociendo. Así, a los descensos de beneficios anunciados ONE (Ocean Network Express) cifrados en un 97% menos que el año pasado, ahora es Maersk quien adelanta que se avecinan “tiempos difíciles” y anuncia nuevos despidos y recortes.
Según dijo el CEO de la compañía, Vincent Clerc, en la presentación de los resultados financieros del tercer trimestre del 2023, el exceso de oferta de transporte marítimo y la contracción de la demanda han provocado una caída en los márgenes que, no por esperada, es menos dolorosa.
Los ingresos de la naviera danesa han ascendido a 12.100 millones de dólares frente a los 22.800 millones del tercer trimestre del pasado año y con un margen de Ebitda del 4,4% “como resultado de flete bajos y menores volúmenes”.
Por secciones, el segmento del transporte marítimo tuvo un buen comportamiento en cuanto a volumen, pero no así en los márgenes.
Por su parte, los segmentos de Terminales y Logística y Servicios tuvieron un mejor desempeño económico. Clerc anunció que serán estos dos segmentos en los que buscarán oportunidades de crecimiento.
El apartado de Transporte Marítimo, Maersk registró un incremento de un 9% en el volumen de mercancía transportada, pero sumó 8.700 millones de dólares de ingresos y arrojó pérdidas de 27 millones de dólares, presionado por la bajada en los fletes “en particular en los intercambios entre Asia y Europa, América del Norte y América Latina”.
Los ingresos en el segmento de logística y servicios fueron de 3.500 millones de dólares -frente a los 4.200 millones del periodo anterior- influido también por el descenso en el precio de los fletes aéreos. La sección de terminales se mantuvo estable en mil millones (-1%) de dólares de facturación, con un 4,4% menos en los volúmenes manipulados.
Número de empleados de Maersk
A principios de año, la plantilla del gigante danés estaba compuesta por más de 110.000 trabajadores y ya se había elaborado un plan de reducción que ha llevado a los actuales 103.000 empleados.
Con el fin de hacer frente a la reducción de ingresos, se ha tomado la decisión de realizar 3.500 nuevos despidos (2.500 en lo que queda de año y otros 1.000 el año próximo) dejando su fuerza laboral por debajo de los cien mil empleados y con un ahorro previsto de 350 millones de dólares.
Maersk también anuncia el recorte en otros campos para ahorrar otros 600 millones de dólares en gastos comerciales, administrativos y generales que se verán a lo largo del año próximo. En este sentido, se extenderá el programa de recompra de acciones en el que se han invertido 763 millones en el 2023.
Además, el gasto de Capex, la inversión en inmovilizado fijo que realiza una compañía para adquirir, mantener o mejorar su activo no corriente, se ha ajustado a la baja para el 2023 en un 8% y el 2024 entre un 8 y un 9% y en el tercer trimestre del año se fija en 819 millones de dólares frente a los 906 millones del año pasado.
La compañía danesa espera para el último tramo del año un crecimiento negativo del volumen global de contenedores en el rango de un – 2% a un – 0,5%, en comparación con el -4% a -1% anterior, y espera resultados económicos en la parte baja de sus previsiones, más cerca de los 9.500 millones que de los 11.000 millones de dólares de su previsión inicial, con un Ebitda de unos 3.500 millones de dólares.
Exceso de oferta
Según diversas consultoras, la influencia en los precios de los fletes por la contracción del mercado se ha visto agravada por la una irrupción de nuevos buques, algunos de ellos provistos de sistemas de propulsión más ecológicos. Los barcos contratados años atrás, ahora empiezan a entrar en el mercado.
Así, Alphaliner prevé que en el 2024 se entreguen 391 buques, más de uno por día, con una capacidad nominal de 3 millones de teus.
En este año 2023 se han incorporado al mercado buques con capacidades de 1,7 millones de teus y aún quedan pendientes de entrega más de 900 barcos portacontenedores, según Clarksons. Esta sobrecapacidad no se verá reducida por el achatarramiento de buques antiguos, en general más pequeños, y presiona a la baja sobre el nivel de los precios de los fletes.
Fuente: https://www.diarioelcanal.com/