Maersk lanzará el primer buque neutro en carbono en 2023
Maersk está más cerca de romper su propio standard: tras fijar en 2030 su meta de descarbonización integral de sus servicios de transporte marítimo, en 2023 podría botar el primer buque transatlántico neutro en carbono.
La principal compañía marítima del mundo instalará en todos sus buques una tecnología de combustible dual, neutralizando así las emisiones de dióxido de carbono al emplear aceite de combustible de azufre muy bajo (VLSFO, por sus siglas en inglés).
“La ambición de A.P. Moller – Maersk –manifestó el CEO del holding, Soren Skou– es liderar el camino en la descarbonización de la logística global. Nuestros clientes esperan que les ayudemos a descarbonizar sus cadenas de suministro globales, y estamos aceptando el desafío, trabajando en la solución de los retos prácticos, técnicos y de seguridad inherentes a los combustibles neutros en carbono que necesitamos en el futuro”.
“Nuestra ambición de tener una flota carbono neutral para 2050 fue un reto enorme cuando lo anunciamos en 2018. Hoy lo vemos como un objetivo desafiante, pero alcanzable”, amplió.
Alrededor de la mitad de los 200 clientes más grandes de Maersk se han fijado, o están en proceso de establecer, metas ambiciosas basadas en la ciencia o cero carbonos para sus cadenas de suministro, y la cifra está en aumento.
“Será un desafío significativo obtener un suministro adecuado de metanol neutro en carbono dentro de nuestro cronograma para ser pioneros en esta tecnología. Nuestro éxito depende de que los clientes adopten este producto innovador y refuercen la colaboración con fabricantes de combustibles, socios tecnológicos y desarrolladores para aumentar la producción lo suficientemente rápido. Creemos que nuestra aspiración de poner en funcionamiento el primer buque de transatlántico neutro en carbono para 2023 es la mejor manera de iniciar la rápida escala de combustibles neutros de carbono que necesitaremos”, señaló Henriette Hallberg Thygesen, CEO de Fleet & Strategic Brands, A.P. Moller – Maersk.
Tanto el buque alimentado con metanol como la decisión de instalar motores de combustible dual en futuras nuevas construcciones forman parte del reemplazo de la flota en curso de Maersk. Las implicaciones de CAPEX serán manejables y se incluirán en la orientación actual.
El metanol (e-metanol y bio-metanol), las mezclas de lignina alcohólica y el amoníaco siguen siendo los principales candidatos al futuro para el transporte marítimo.
Un socio clave de colaboración es el Centro de Transporte De Carbono Cero Maersk McKinney, una entidad de investigación y desarrollo independiente y sin fines de lucro, que trabaja en todos los sectores, organizaciones, áreas de investigación y reguladores para acelerar el desarrollo y la implementación de nuevos sistemas y tecnologías energéticas.
Fuente: https://tradenews.com.ar/