Los demonios de “ODEBRECHT”

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Santo Domingo.- Están sueltos los “demonios en todo el país”, tras la designación del juez de instrucción, con lo que se espera destapar la ya no caja de Pandora, sino la olla de presión del caso Odebrecht, en las próximas horas. Se esperan que ya empiecen a salir a luz, las listas de los agraciados.

Igualmente, se conocerá la famosa lista de los acusados por parte de la Procuraduría General de la República (PGR) y sus supuestas jurisdicciones especiales, aspecto que mantiene en suspenso a la población, porque por lo visto no se sabe quién se va en la colada.

Francisco Ortega, juez de la Suprema Corte de Justicia, de 48 años, fue designado el viernes pasado para instruir el caso del pago de los pequeños sobornos, que sobrepasan los 92 millones de dólares de la empresa brasileña Odebrecht para obtener 17 obras públicas y que luego habrían sido sobrevaluadas. El bajo azufre ya llega al parque independencia y se espera que no pase de ahí, ya que por lo visto los imputados son todos de un ladito o no tanto del otro.

El caso Odebrecht será instruido por un juez de la Suprema Corte de Justicia debido a que el expediente involucra varios legisladores, que tienen jurisdicción privilegiada y por ley “arrastran” a los demás implicados. Por esa razón acondicionan la suite penitenciaria, en el palacio de justicia de ciudad nueva. La moraleja de esto caso a la sociedad, no te ensucies la mano con poca cosa.. para que puedas gozar de todos los privilegios de un proceso y condena acomodada.

Del mismo modo la sociedad se mantiene en una agonía casi de muerte, ante la posibilidad de que se excluyan, algunos mas pegados que otros entre los acusados, o algunas personas con gran influencia económica y social.

El pasado viernes, se inicio un proceso de remodelación y acondicionamiento profundo a la cárcel preventiva del Palacio de Justicia de Ciudad. Esto se debe que hay que te tener bastante cómodos a los imputados de este hecho, por lo que se pintaron las celdas, instalaron baños y otras comodidades que debe tener algún delincuente de alto calibre, considerando que es un ciudadano de la república y merece ser tratado con las mismas comodidades que todos los demás delincuentes.

El fukku de Odebrecht; abarca los gobiernos de Hipólito Mejía, Leonel Fernández y Danilo Medina, y el procurador Jean Alain Rodríguez le toco esta papa caliente, que de seguro no se lo dijeron cuando le salió el ¡decreto! pero ahora “el lio esta armaooo” y le toca investigar y tratar de salir ileso de esta trifulca delictiva y política.

El Procurador General de la República ya conoce Brasil y casi habla portugués y ya hablo ingles en Washington D. C, donde se entrevistó con el fiscal general, Jeff Sessions, y el director del Buró Federal de Investigaciones. Por lo visto será el único funcionario de este gobierno, que se le quitara el deseo de viajar, porque cada vez que sale viene con una vaina nueva, con la suerte que ya no estamos en Roma.