Logística en México 2025: preparación para empresas ante nuevos desafíos

La logística en México 2025 se enfrenta a un escenario desafiante marcado por eventos geopolíticos, nuevas regulaciones comerciales y un entorno global cada vez más volátil.

Uno de los elementos que ha generado mayor incertidumbre en el comercio internacional ha sido el anuncio de nuevos aranceles por parte de Donald Trump en abril de 2025, impactando directamente a productos clave exportados desde México hacia Estados Unidos.

En este contexto, las empresas mexicanas deben adaptarse a las nuevas condiciones del mercado, repensar sus estrategias de abastecimiento y distribución, y aprovechar oportunidades derivadas del nearshoring, la automatización y las tecnologías emergentes en supply chain.

Los aranceles de Trump en abril 2025: ¿qué se impuso y por qué?

En abril de 2025, el expresidente Donald Trump, en su nueva campaña por reforzar la “América Primero”, anunció un paquete de nuevos aranceles sobre productos importados desde México, argumentando la necesidad de proteger la industria estadounidense y frenar el ingreso de productos considerados “de bajo costo y competencia desleal”.

Principales productos afectados:

• Autopartes y componentes electrónicos

• Frutas y vegetales frescos

• Productos cárnicos procesados

• Materiales de construcción como cemento y acero

• Textiles y confecciones

Los aranceles oscilaron entre el 10% y el 25%, dependiendo del sector. Esto generó una reacción inmediata en la cadena logística transfronteriza y forzó a muchas empresas mexicanas a replantear sus costos operativos, tiempos de entrega y márgenes de exportación.

Impacto en la logística en México en 2025

Ante la imposición de nuevos aranceles por parte de Estados Unidos, las cadenas de suministro entre México y su principal socio comercial han comenzado a experimentar ajustes significativos.

A continuación, se detallan los principales efectos que estos cambios están generando en la logística en México en 2025, desde el aumento de costos hasta la reconfiguración de rutas y operaciones.

Disminución en la velocidad del comercio transfronterizo

Uno de los primeros efectos fue el incremento en los tiempos de despacho aduanal, debido a mayores revisiones, nuevos trámites y la necesidad de cumplir con requisitos adicionales. Esto afectó a los operadores logísticos,

transportistas y centros de distribución en estados fronterizos como Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila y Nuevo León.

Reestructuración de rutas y estrategias de envío

Empresas exportadoras comenzaron a diversificar rutas de envío, incluyendo:

• Mayor uso de puertos del Pacífico y Golfo de México para exportar vía marítima hacia otros mercados.

• Aumento de operaciones intermodales (camión-tren) hacia Canadá como alternativa al mercado estadounidense.

• Exploración de alianzas logísticas con países de América Latina y Asia para disminuir dependencia de Estados Unidos.

Incremento en los costos logísticos

El aumento de aranceles derivó en:

• Incremento de costos de transporte por rediseño de rutas.

• Mayor inversión en gestión aduanera y consultoría legal.

• Ajustes en inventarios de seguridad y tiempos de lead time.

Estrategias de preparación logística para empresas mexicanas

Análisis de riesgo comercial y de proveedores

Es indispensable que las empresas:

• Mapeen su cadena de suministro para identificar proveedores, rutas críticas y productos sensibles a los aranceles.

• Evalúen escenarios de contingencia con base en costos, tiempos de entrega y dependencia de EE. UU.
Nearshoring y relocalización de centros logísticos

México ha sido un beneficiario natural del nearshoring, pero ahora se hace necesario relocalizar operaciones logísticas de forma más estratégica:

• Apertura de centros de distribución multimodales en estados no fronterizos.

• Establecimiento de hubs logísticos en zonas industriales con acceso a puertos marítimos o ferrocarril.

• Uso de zonas económicas especiales para reducir impacto fiscal y atraer inversión.

Digitalización y visibilidad en tiempo real

La tecnología juega un rol clave para responder con agilidad a los cambios:

• TMS (Transportation Management Systems) para optimizar rutas y monitorear envíos.

• WMS (Warehouse Management Systems) para mejorar eficiencia operativa en almacenes.

• Sistemas de trazabilidad y visibilidad en tiempo real, fundamentales ante retrasos aduanales.
Sectores clave que deben responder con urgencia

Industria automotriz y autopartes

Con un alto porcentaje de exportación hacia EE. UU., este sector enfrenta desafíos complejos. Se recomienda:

• Fortalecer relaciones con proveedores de componentes en Asia o América del Sur.

• Considerar procesos de manufactura avanzada local para evitar importaciones de insumos arancelados.
Agroindustria y alimentos procesados

Productos perecederos están particularmente expuestos a demoras y sobrecostos. Se aconseja:

• Implementar logística de cadena fría de última generación.

• Desarrollar nuevos mercados de exportación en América Latina o Europa.

• Negociar contratos con cláusulas de ajuste por aranceles.

Textil y confección

La deslocalización textil hacia México creció con el nearshoring, pero los nuevos aranceles demandan:

• Apostar por producción con valor agregado (moda sostenible, telas técnicas).

• Aprovechar certificaciones de origen para esquivar ciertos aranceles.

Oportunidades en medio de la crisis

Aunque el escenario parece complejo, también surgen nuevas oportunidades para la logística en México en 2025:

Fortalecimiento del comercio intra-Latam

Los exportadores pueden encontrar nichos de mercado en Brasil, Colombia, Chile, Argentina y Centroamérica.

Impulso a la innovación logística

Las empresas están acelerando inversiones en:

• Vehículos eléctricos de reparto

• Robótica en almacenes

• Plataformas de IA para predicción de la demanda y optimización logística

Desarrollo de talento logístico

La demanda de profesionales en comercio exterior, logística aduanera y análisis de datos crece. Universidades y empresas deben colaborar para formar talento con enfoque global.

Los aranceles de Trump en abril 2025 obligan a las empresas a actuar con rapidez, visión y resiliencia. No se trata solo de sortear las restricciones actuales, sino de repensar los modelos logísticos hacia uno más diversificado,

automatizado y menos dependiente de Estados Unidos.

Las compañías que logren integrar tecnologías, diversificar sus rutas y mercados, y fortalecer sus cadenas de valor estarán mejor posicionadas para prosperar en este entorno complejo. La clave estará en pasar de la reacción a la anticipación.

Fuente: https://thelogisticsworld.com/

 

 

 

 

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