Lancia Stratos: la historia de uno de los autos de rally más bellos y exitosos
Justamente, el 25 de septiembre de 2023, el Lancia Stratos, uno de los autos de rally más icónicos y legendarios, celebra 50 años desde su primera victoria internacional.
Conocido por el público como “la bête à gagner” (la bestia para ganar), este auto creado por la marca italiana fundada en 1906 rápidamente logró colocarse como una leyenda en el mundo del rallismo.
Pero además de ser reconocido por sus victorias en el automovilismo, el Stratos es considerado como uno de los autos más bellos no solo de Lancia, sino de la historia del automóvil.
Su carrocería fue dotada de elementos de diseño esenciales que entraron en el imaginario colectivo y guiaron en la creación de los futuros coches de Lancia. Tanto los faros traseros redondos, como la forma aerodinámica y el interior, son los elementos que distinguen a este modelo.
Un auto diseñado para ganar
Después de participar en diversas competiciones y conseguir su primer podium en 1973, todavía entre prototipos, conducido por el dúo de Munari y Mannucci, el Lancia Stratos logró su primera victoria internacional en el Tour de France Automobile.
De hecho, Lancia Stratos se convirtió en un verdadero conquistador de los rallyes, acumulando una victoria tras otra: el auto ganó el Rally de Montecarlo tres veces seguidas, tres Campeonatos del Mundo de Constructores, de 1974 a 1976, e incluso tres Campeonatos de Europa de Pilotos. Conduciendo un Stratos, Munari también ganó la Copa de Pilotos de Rally de la FIA en 1977.
Fue a partir de la temporada de 1975, cuando el Lancia Stratos lució la imagen emblemática por la que todavía es más recordado: los colores blanco y verde de su patrocinador Alitalia, con el logotipo tricolor de la aerolínea, doblado y armonizado en forma de cuña para crear una de las libreas más bellas de la historia del automovilismo.
Sin duda, el Lancia Stratos fue creado específicamente para ganar y romper moldes, dadas sus grandes diferencias con los modelos de la época. Inspirado en el prototipo “Strato’s Zero” de 1970, la versión final se presentó al año siguiente.
Un icono de diseño
Todo en este automóvil futurista en forma de cuña fue diseñado para los rallyes: la parte delantera era afilada y estaba en armonía con las salpicaderas, mientras que el parabrisas inclinado abarcaba el pilar delantero y continuaba hacia las ventanas laterales. Por su parte, el techo caía verticalmente sobre la pequeña ventana trasera, envuelta por el gran cofre.
Tanto el cofre y la cajuela, que consistían en dos carcasas ligeras, incluían sus respectivas salpicaderas, con una amplia abertura para una acción rápida durante el apoyo a la carrera. Asimismo, las luces redondas y un ala asertiva se destacaban en la parte trasera, mientras que el motor era un V6 de 270 caballos de fuerza basado en el Ferrari Dino 246.
Pero el Lancia Stratos también fue revolucionario en su interior, totalmente centrado en el conductor y diseñado para los resultados y la emoción: dos asientos y solo dos compartimentos para cascos de carreras, una característica distintiva de la versión de carretera también. Al igual el el llamado “bloqueo de color” en el interior creó juegos continuos de contrastes para un eclecticismo totalmente Lancia, utilizando los colores primarios de azul, rojo y amarillo.
Un legado que sigue vivo
Esta imagen disruptiva para la época estableció al modelo como un ícono histórico también desde otro punto de vista: el diseño. Componentes como las luces traseras redondas, el ala aerodinámica y la combinación de colores primarios en el interior hicieron del Lancia Stratos un auto de diseño futurista que sigue siendo contemporáneo hasta el día de hoy.
Fuente: https://mexico.as.com/