IDAC pondera trayectoria del desaparecido Norge Botello
Santo Domingo.- Al cumplirse un nuevo aniversario del fallecimiento de Norge Botello, director fundador del Instituto Dominicano de Aviación Civil (IDAC), el actual titular, doctor Alejandro Herrera, ponderó su trabajo a favor de la entidad, y como hombre público sus acciones en pro de la democracia y el pueblo dominicano.En las oficinas del IDAC se hizo, a media mañana de este lunes, una ligera pausa en las labores para recordar en la fecha de su fallecimiento, al primer director de esa entidad que se constituyó mediante la Ley 491-06, promulgada en el año 2006.
A su memoria, familiares, amigos, relacionados y funcionarios del IDAC y de la Junta de Aviación Civil (JAC) participaron de una eucaristía el pasado domingo, en la iglesia Jesús Maestro del sector Mirador Sur.
El doctor Herrera dijo que Botello es el director histórico del IDAC, el cual tiene el privilegio de contar como fundador a un hombre de grandes condiciones humanas.
“Gracias a su liderazgo se pudo organizar el sector aeronáutico nacional y sentar las bases para que quienes le hemos sucedido en esta posición sigamos en el desarrollo y el avance institucional de la entidad que nos acoge para realizar nuestras labores cotidianas”, dijo Herrera.
Botello, al momento de su fallecimiento era Secretario de Estado sin Cartera, miembro del Comité Político del Partido de la Liberación Dominicana, organización política de la cual fue uno de sus fundadores junto al ex Presidente de la Republica, profesor Juan Bosch, en 1973.
Su fallecimiento causó gran consternación en la vida pública nacional, constituyendo su sepelio una sentida expresión de dolor.
Además de director del IDAC, fue director de la Autoridad Portuaria Dominicana, secretario de Interior y Policía, diputado y presidente de la Cámara de Diputados con una larga militancia partidaria en el movimiento 14 de Junio y en el Partido de la Liberación Dominicana.
Ingresó a la vida política muy joven como miembro de la resistencia antitrujillista en los años finales de la dictadura.
Tuvo una destacada participación en la insurrección cívico militar de abril de 1965, en la que fue comandante del comando B-3, ubicado en la calle Jacinto de la Concha, en Villa Francisca.