Google utiliza la inteligencia artificial en los semáforos para reducir la contaminación

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El transporte por carretera es el responsable de un 25% de las emisiones mundiales de dióxido de carbono provenientes del consumo de combustibles, según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Una gran cantidad de los gases de efecto invernadero se emiten en las intersecciones de las ciudades, donde la contaminación puede ser hasta 29 veces mayor que en las carreteras abiertas, de acuerdo con la información publicada por Google en su blog.

El gigante tecnológico asegura que aproximadamente la mitad de las emisiones en los cruces y semáforos provienen de los vehículos que se detienen y arrancan. Por ello considera una prioridad optimizar los semáforos a través de las conocidas ondas verdes para dar mayor fluidez al tráfico y reducir así la emisión de sustancias contaminantes a la atmósfera.

Google Research se ha puesto al frente de un proyecto denominado Green Light (luz verde) para ayudar a mejorar el transporte en las ciudades y, en consecuencia, reducir la huella de carbono en las grandes conurbaciones urbanas. La compañía de Silicon Valley utiliza la inteligencia artificial para optimizar los semáforos en las intersecciones, brindado su apoyo a los responsables de la movilidad urbana.

Gracias a esta herramienta, los ingenieros pueden introducir mejoras en las infraestructuras existentes para reducir el número de paradas de los vehículos en los semáforos en rojo.

La optimización de la circulación en los cruces y la coordinación de las intersecciones adyacentes para crear ondas verdes permite a las ciudades mejorar el flujo de tráfico y reducir las emisiones en paradas y arranques en los semáforos. Según los datos analizados por Google, en las 70 intersecciones de 12 ciudades donde ya ha puesto en marcha la onda verde con la ayuda de la inteligencia artificial, se han reducido hasta un 30% las emisiones en las detenciones y hasta un 10% en las intersecciones.

“En las ciudades donde se está aplicando el proyecto Green Light se pueden estar reduciendo emisiones y ahorrando combustible en un total de 30 millones de trayectos cada día”, apunta Google en su blog.

Seattle y Río de Janeiro son las dos únicas ciudades de América del Norte y América del Sur donde ya se aplica el proyecto Green Light. Este programa también está presente en otras 10 ciudades europeas y asiáticas: Manchester, Hamburgo, Budapest, Haifa, Abu Dhabi, Bangalore, Hyderabad, Calcuta, Bali y Yakarta.

Antes de la utilización de la IA, la tarea de acceder a datos confiables para optimizar la sincronización de semáforos representaba un desafío complejo y costoso para un gran número de ingenieros especializados en tráfico urbano. Como consecuencia, numerosas intersecciones continuaban operando con configuraciones obsoletas.

No obstante, el proyecto Green Light ha surgido como un catalizador de cambio, al introducir soluciones innovadoras respaldadas por la inteligencia artificial. Con la ayuda de Google Maps para modelar las intersecciones y el flujo del tráfico, el líder tecnológico ha construido un modelo basado en la IA de cada cruce. Se han tenido en cuenta aspectos como la estructura de la intersección, patrones de tráfico (inicio y parada) y horarios para identificar posibles ajustes en la sincronización de los semáforos.

Después de que el sistema de Google Research haya recopilado y procesado estos datos, emplea algoritmos de IA para detectar posibles mejoras en la sincronización de los semáforos. Una vez completada esta labor, la compañía comparte las recomendaciones resultantes con las autoridades de tráfico de la ciudad, quienes tienen la opción de implementarlas si así lo deciden.

Fuente: https://www.lavanguardia.com/