Ford entrega modelo C-Max que se conduce sin brazos

Madrid.- David Rivas, un madrileño de 33 años, ya puede ir al trabajo en coche. Pese a nacer sin brazo derechoy tener muy poca movilidad en el izquierdo, David se sacó el carnet de conducir el pasado julio. Ahora,Ford le ha regalado un C-Max 2.0 TDCi Titanium especialmente modificado para que pueda conducirlo? sólo con sus pies.

ENRIQUE ESPINÓS

Ford hizo ayer entrega de este C-Max –valorado, debido a su adaptación, en más de 66.000 euros- a David en un acto celebrado en Madrid, aunque este madrileño lleva conduciendo y haciéndose con el vehículo desde el pasado mes de enero: Un proceso que ‘ha sido casi como un parto’, reconoce David. No es para menos ya que, debido a su discapacidad, David ha de conducirlo únicamente con los pies.

David ya fue noticia el pasado mes de julio, cuando se convirtió en el primer europeo sin brazos en lograr el carnet de conducir –aunque, todo hay que decirlo, el examen práctico lo sacó a la segunda- y lo hizo a los mandos de un Ford Mondeo especialmente adaptado y propiedad de la autoescuela Irrintzi, de Basauri, Vizcaya –la única de España especializada en impartir clases de conducir a discapacitados.

A raíz de aquella noticia, desde la Fundación DKV Integralia, donde trabaja David y que tiene como objetivo facilitar la integración social y laboral de las personas con discapacidad, contactaron con Ford para comentarles su situación –David, hijo de un transportista, ha sido un amante de los coches desde pequeño- y la marca decidió apoyarlo regalándole un coche adaptado especialmente a su medida. Además, Ford planea contar con su ayuda en un futuro próximo para facilitar la adaptación de sus vehículos a otras personas con discapacidad.

¿Cómo es este C-Max?

Se trata de un 2.0 TDCi con acabado Titanium, que entrega 140 CV y que está equipado con la caja automática secuencial de doble embrague Powershift. Se trata de un coche estrictamente de serie y valorado en 26.050 euros al que, eso sí, han debido efectuarle importantes adaptaciones específicas para que David pueda conducirlo.

En total, estas modificaciones, realizadas por el grupo alemán Paravan, han tenido un coste de más de 40.000 euros€ Pero ¿cómo se ha modificado este C-Max?

En primer lugar, en el suelo del vehículo se han adaptado tres módulos –ver A, B y C-. Con el primero –A-, David es capaz de acelerar y frenar –empujando su pie izquierdo hacia delante y hacia atrás.

Además, accionando repetidamente y con los dedos el pulsador circular situado en su extremo, David es capaz de hacer funcionar el claxon, las luces largas, los intermitentes…

Un segundo módulo –B-, situado a la derecha permite a David hacer girar la dirección del coche: lo hace aprisionando el mando circular entre el dedo gordo y el índice de su pie y girándolo en la dirección e intensidad que se requiere.

Además, justo delante de este ´volante´, este C-Max cuenta con un selector de marchas con el que David, utilizando de nuevo los dedos de los pies, puede insertar el programa de la caja de cambios que requiera: ya sea marcha adelante –D-, atrás –R-, punto muerto –N- o posición de detención –P-.

Entre ambos módulos se han colocado tres interruptores auxiliares. Los dos superiores son los encargados de accionar los elevalunas delanteros, mientras que el tercero conecta y desconecta el freno de mano eléctrico.

Por último, un tercer módulo –C–, situado en el lugar habitual de la palanca del cambio, es el encargado de indicar a David si se produce alguna avería o mal funcionamiento del sistema que, ajustable –se puede regular la respuesta del mando acelerador, la dureza de la dirección..-, funciona únicamente conectado a la batería de serie del vehículo.

David ya utiliza su C-Max a diario para ir a trabajar desde Parla, donde reside, al centro de Madrid –anteriormente, se veía obligado a usar la red de Cercanías-, donde reconoce que ‘la gente no suele darse cuenta de que conduzco sin brazos, si acaso me miran algo más cuando me detengo en algún desvió, en algún semáforo…’, pero también se atreve con algún viaje largo: ‘Ya me he ido hasta Cádiz y sin ningún problema’.

De hecho, también ha podido asegurarlo sin mayor problema, sólo ‘incluyendo como extras las modificaciones de la adaptación’.

Fuente: http://www.autofacil.es