Este es el alimento recomendado por la ciencia para no perder la memoria
El cerebro, como el resto del cuerpo, envejece a medida que pasa el tiempo, por eso es normal que con los años tengamos pequeños olvidos y nuestra memoria no sea la de la juventud. Forma parte del proceso normal de envejecimiento: perdemos neuronas y el cerebro, literalmente, se encoje, se hace más pequeño, igual que, por ejemplo, perdemos masa ósea y aumenta el riesgo de fracturas. Sin embargo, ese proceso natural de pérdida de memoria y de otras funciones cognitivas a medida que vamos soplando velas año tras año puede frenarse con buenos hábitos. Y uno de los principales es la alimentación.
Por qué es tan importante la alimentación para la memoria
Nuestro cerebro necesita nutrientes específicos, como ácidos grasos omega 3, antioxidantes y vitaminas, para funcionar de manera óptima. Estos nutrientes ayudan a proteger las células cerebrales, promoviendo la comunicación entre ellas y facilitando la formación de nuevas conexiones.
Los alimentos ricos en omega-3, como el pescado azul, las nueces y las semillas de chía, son fundamentales para mantener la flexibilidad de las membranas celulares. Los antioxidantes presentes en frutas y verduras combaten el estrés oxidativo, un proceso relacionado con el envejecimiento cerebral.
Además, las vitaminas del grupo B, presentes en granos enteros y verduras de hojas verdes, son esenciales para la producción de neurotransmisores que influyen en la memoria y la función cognitiva.
En definitiva, una dieta equilibrada y rica en estos nutrientes es clave para prevenir la pérdida de memoria pero si, además, incluimos en nuestra alimentación alimentos que sean especialmente buenos para el cerebro será como un seguro de vida para la memoria. Uno de ellos es el azafrán.
Ese toque mágico en tus platos que estimula el cerebro
El azafrán es como una especie de toque mágico para muchos platos españoles. ¿Qué sería una paella sin azafrán para dar al arroz ese color amarillo tan característico? También se usa en guisos, sopas, salsas… Incluso en dulces, turrones o helados.
Esta especia tiene una historia fascinante que se remonta a la antigua Grecia y se ha extendido por culturas y civilizaciones a lo largo de los siglos. Originario de Asia Menor, este precioso hilo rojo dorado ha sido un tesoro codiciado y un componente esencial en diversas tradiciones.
En la antigüedad, los egipcios ya lo utilizaban, y los griegos y romanos lo adoptaron tanto en la cocina como en rituales religiosos. Durante la Edad Media, el azafrán se convirtió en un bien comercial valioso y a veces se intercambiaba por su peso en oro.
El azafrán no solo era y es apreciado como especia culinaria. Se ha usado en la medicina tradicional a lo largo de la historia y se le atribuyen propiedades antidepresivas, afrodisíacas y antiinflamatorias. Pero si para algo sirve el azafrán es para proteger la memoria.
Azafrán para la memoria
Esta especia es como un elixir de juventud para el cerebro porque provoca una triple acción gracias a sus compuestos bioactivos:
• Efectos antioxidantes: El estrés oxidativo provocado por los malos hábitos, la contaminación, el sol o los procesos internos del cuerpo pueden dañar las células del cerebro, aumentando la pérdida de memoria y el deterioro cognitivo. Los antioxidantes presentes en el azafrán, como el crocin, ayudan a neutralizar los radicales libres y proteger las células cerebrales del estrés oxidativo.
• Influencia en neurotransmisores: Se ha observado que el azafrán puede tener efectos sobre la liberación de serotonina y otros neurotransmisores en el cerebro, lo que podría influir en el funcionamiento cognitivo y mejorar la memoria.
• Protección neuronal: Los compuestos del azafrán, como el safranal, han mostrado propiedades neuroprotectoras en estudios de laboratorio, lo que sugiere que podrían ayudar a preservar la salud de las células cerebrales y mejorar la memoria.
Cómo utilizar el azafrán
El azafrán es único por su sabor y su característico color amarillo dorado. Aquí te dejo algunas formas de usar el azafrán en la cocina:
1. Infusión de azafrán: Calienta un poco de agua (no hirviendo) y sumerge los hilos de azafrán en ella. Deja que se infusione durante al menos 15 minutos. Esta infusión se puede agregar a sopas, salsas, arroces o paellas para dar sabor y color.
2. Molienda de azafrán: Puedes moler los hilos de azafrán con un mortero y añadir la mezcla a tus platos. Esto ayuda a liberar aún más el sabor y el color del azafrán. Asegúrate de utilizar una pequeña cantidad, ya que el azafrán es una especia potente.
3. Azafrán en polvo: Si tienes azafrán en polvo, puedes agregarlo directamente a tus recetas. Ten en cuenta que el azafrán en polvo puede ser más fácil de distribuir uniformemente en tus platos.
4. Aderezo de azafrán: Mezcla el azafrán con un poco de aceite de oliva caliente y úsalo como aderezo para ensaladas, pescados o verduras. Esto realzará el sabor de tus platos y les dará un toque de lujo.
5. Arroces y paellas: El azafrán es un ingrediente esencial en muchas recetas de arroces y paellas. Puedes agregar los hilos directamente al caldo o al agua de cocción para que infundan su sabor y color en todo el plato.
6. Postres y bebidas: Experimenta añadiendo azafrán a postres como helados, cremas o incluso a algunas bebidas. Aporta un toque exótico y una agradable fragancia.
Fuente: https://www.sabervivirtv.com/