Estados Unidos y Rusia enfrentan a la ONU
Nueva York.- La ONU no debe inmiscuirse en el conflicto interno de Siria, dijo ayer el embajador de Rusia ante la ONU, Vitaly Churkin, al rechazar un proyecto de resolución llamando a la renuncia del gobernante sirio Bachar al-Asad.“Posiblemente hay una última posibilidad de romper la espiral de violencia que arrasa con Siria y su pueblo”, señaló Vitaly Churkin, para agregar que el Consejo de Seguridad de ONU “no puede imponer parámetros para un acuerdo interno. Sencillamente no tiene el mandato para hacerlo”.
En tanto la secretaria de Estado estadounidense Hillary Clinton dijo ayer que el “reino del terror” del presidente Bashar al-Asad en Siria terminará y que la principal duda es cuánta gente deberá morir antes.
En un discurso ante el Consejo de Seguridad de la ONU para presionar a Rusia a apoyar un proyecto de resolución que exige la partida de Asad, Clinton dijo que Siria se convertirá en un problema cada vez mayor mientras Asad se mantenga en el poder.
Mientras tanto, la oposición siria exhortó a la comunidad internacional a actuar contra las masacres y convocó a una jornada de duelo y cólera tras una nueva oleada de violencia con epicentro en la región de Homs que dejó el lunes casi 100 muertos y ayer sumó 20 más.
De gira en Oriente Medio, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, calificó la violencia en Siria de amenaza para la paz y dijo esperar que la reunión del Consejo de Seguridad en Nueva York dé frutos rápidamente.
Clinton, la dirigencia de la Liga Árabe y los ministros de Relaciones Exteriores británico y francés buscarán aprobar una resolución contra el régimen sirio de Bachar al-Asad.