El turismo de Brasil acumula pérdidas por US$ 73.000 millones
Según un relevamiento del sector privado, Brasil registra desde el inicio de la pandemia pérdidas por R$ 376.600 millones (unos US$ 73.000 millones) y, a pesar de que los números de los últimos meses muestran una tendencia hacia la reactivación, la industria sigue perdiendo dinero.
A lo largo de la pandemia, declarada oficialmente en marzo de 2020, Brasil se ha mostrado como un país de luces y sombras, y una apertura temprana de la actividad turística le ha permitido mitigar en parte el impacto de ser la segunda nación del planeta en casos positivos y fallecimientos por COVID-19.
Apalancado en el turismo interno, inició una lenta pero constante recuperación hasta enero de 2021 inclusive.
Terminado el mes de mayor demanda del verano, explotó la segunda ola. Entre febrero y abril inclusive todo se desmoronó. A partir de mayo se retomó la actividad; junio consolidó la tendencia positiva; y a partir de julio ya se proyecta una evolución gradual, siempre que no explote una tercera ola por la variante Delta.
Mientras los pasajeros brasileños siguen vedados en buena parte del mundo, el doméstico da signos de movimiento, pero todavía muy lejos del volumen necesario para sanar el tremendo daño que ha sufrido el ecosistema turístico nacional en este casi año y medio. ¿Es posible cuantificar ese impacto?
Pero no porque hoy se vislumbre una reactivación eso significa que hoy se haya dejado de perder dinero. Pese a las ayudas estatales y a los créditos blandos, la gremial empresaria afirma que en mayo de 2021 las pérdidas fueron de R$ 21.400 millones (unos US$ 4.140 millones).
De todos modos, el referente económico de la CNC, Fabio Bentes, consideró que estas pérdidas “se han reducido en los últimos meses y seguirán esa misma tendencia en la medida en que el proceso de vacunación avance y las barreras a la circulación de turistas se relajen”. “Para los próximos meses la tendencia es que los servicios, incluido el turismo, ganen dinamismo”, agregó.
Como se puede imaginar, el principal impacto se verificó en sus dos grandes hub, San Pablo y Río de Janeiro, que acapararon en conjunto el 52,6% de ese déficit (cerca de R$ 200.000 millones, unos US$ 38.700 millones, entre marzo de 2020 y mayo de 2021.
Asimismo, esto tuvo “un impacto significativamente negativo” en el mercado laboral formal relacionado con el turismo y, de hecho, sostienen que es “uno de los pocos segmentos económicos que aún sigue sin crear empleo desde la irrupción del SARS-CoV-2”.
Finalmente, en términos económicos en general, las previsiones del Banco Central indican que el PIB brasileño registrará en 2021 un alza del 5,2%, lo que permitiría compensar la caída del 4,1% verificada en 2020. Sin embargo, analistas y organismos internacionales afirman que el crecimiento no sería mayor a los 0,8 puntos porcentuales.
Fuente: https://www.hosteltur.com/