Centrales nucleares alemanas no resistirían el impacto de una aeronave
Alemania.- Después de la “comisión de ética”, la “comisión de expertos sobre seguridad”. Una tras otra, las diferentes comisiones creadas por el gobierno alemán después del accidente de Fukushima con miras a revisar su política nuclear, arrojan veredictos del mismo tenor: hay que abandonar la energía nuclear, “tan rápido como sea razonable”. En otras palabras, cuanto antes, mejor, aunque no a lo loco.Fue la fórmula expresada por el ministro de medio ambiente Norbert Röttgen, al dar a conocer las conclusiones de los expertos en materia de seguridad. La comisión debía dictaminar el nivel de seguridad ante escenarios como terremotos, inundaciones, cortes accidentales de suministro eléctrico y atentados, y presentar sus conclusiones al gobierno, que deberá tomar una decisión el 6 de junio.
Su informe aclara que ninguna de las diecisiete centrales alemanas está convenientemente protegida contra el impacto de un avión de pasajeros grande, y siete de ellas no lo está ni siquiera contra el choque de un avión pequeño, explicó Rudolf Wieland, jefe de la comisión, que ha realizado su trabajo en menos de dos meses, un plazo que muchos expertos consideran insuficiente para analizar con seriedad la seguridad de cada reactor.
Sobre un nivel de máxima seguridad cifrado en tres, cuatro centrales han merecido una puntuación de cero y otras tres de uno. Las otras diez centrales, más modernas, han merecido el nivel dos, como media, aunque ninguna de ellas obtuvo la calificación dos en todos los parámetros examinados, explicó Wieland.
Röttgen rechazó un cierre inmediato de las centrales âla anterior comisión mencionó un plazo de diez años para cerrar la última de ellas. “Debemos hacerlo tan rápido como sea razonable”, dijo. Añadió que es necesario, “buscar fuentes de energía más seguras e interesantes”.
Las filtraciones conocidas el día 11 sobre las conclusiones de otra comisión creada por el gobierno tras Fukushima, la llamada “comisión de ética”, contienen una clara recomendación para, “el abandono total de la energía nuclear”, así como la consideración de que, “hay muchas alternativas a la energía nuclear, y todas ellas tienen menos riesgos”. La comisión no vio especial problema para el suministro de electricidad ni para el cumplimiento de los objetivos nacionales de reducción de emisiones de CO2, si Alemania se desnucleariza por completo en diez años.
Por su parte el Foro Nuclear Alemán, que representa a la industria del sector, presenta un panorama de aumento de costos “para toda la economía”, con “imposibilidad de cumplir los objetivos climáticos”, “mayor dependencia de combustibles fósiles” e “importación de electricidad”, así como “intensos debates en Europa”.
Mientras tanto, el consorcio energético nuclear RWE prevé construir en Holanda, junto a la frontera alemana, una central nuclear que podría vender su energía a Alemania. A diferencia de Alemania, Holanda no ha alterado su política nuclear con motivo de Fukushima, por lo que RWE eludiría así la decisión alemana, informa Der Spiegel.