Barack Obama ofreció su firme apoyo a decisión que los puertorriqueños tomen sobre su futuro político
San Juan.- El presidente Barack Obama expresó hoy durante su estancia en San Juan de apenas cuatro horas su firme apoyo a la decisión que los puertorriqueños tomen sobre su futuro político.‘Cuando los puertorriqueños tomen una decisión -sobre el estatus político-, mi administración os apoyará’, subrayó Obama en su discurso al comenzar la visita que ha sido interpretada como un intento de buscar el respaldo electoral de los cuatro millones de boricuas que residen en EEUU.
Esos cuatro millones de puertorriqueños, que residen mayormente en Nueva York, Florida, Illinois y Pensilvania, tienen derecho a voto en las elecciones presidenciales y al Congreso federal, pero no así los boricuas que viven en la isla.
Obama reconoció que la solución al problema del estatus es una prioridad para su administración, razón por la que impulsó el llamado Grupo de Trabajo de la Casa Blanca sobre Puerto Rico.
Agregó que el informe del Grupo de Trabajo de la Casa Blanca servirá para que ‘los residentes de la isla puedan determinar su propio futuro’.
El discurso de Obama también aludió a la difícil situación económica por la que atraviesa la isla caribeña, por lo que se comprometió a trabajar de forma conjunta en la superación de la crisis.
Con esta visita, la Casa Blanca ha tratado de acercarse de manera directa a los 857.000 puertorriqueños que viven en Florida, un estado siempre clave en las elecciones presidenciales.
Entre la comitiva que recibió a Obama a pie de la escalerilla del avión presidencial se encontraba la estrella boricua de la canción Marc Anthony, a quien el presidente obsequió con un afectuoso beso en la mejilla, un detalle que analistas han visto como un claro guiño electoral.
El tema de la solución del estatus político no ha ensombrecido al de la economía y de la falta de trabajo, que son en estos momentos los que más preocupan a los puertorriqueños, que sufren un desempleo por encima del 16 por ciento y un déficit cercano a los 3.000 millones de dólares.
Obama señaló que es consciente de esos problemas y que aspira a que ‘cada familia de la isla tenga trabajo y sustento para sus hijos’.
‘Por esa razón nuestro plan económico y de reforma de la salud incluye a Puerto Rico’, indicó Obama, para quien tanto la isla como todo Estados Unidos deben hacer un esfuerzo en la mejora del sistema educativo.
Obama también tuvo durante su breve discurso palabras de afecto para los miles de puertorriqueños que han prestado servicio al país en los conflictos de Afganistán e Irak.
La mejora de la eficiencia energética fue un punto que no olvidó Obama, que recordó que uno de los edificios históricos más importantes de la capital puertorriqueña se alimenta a través de pantallas fotovoltaicas.
La visita de Obama ha sido rechazada por el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), que según su presidente ejecutivo, Fernando Martín, ha sido utilizada por el presidente estadounidense para ganarse el voto de los millones de latinos del país norteamericano.
El PIP, que aglutina a poco más del 3 por ciento del electorado, encabezó hoy una manifestación apoyada por varias organizaciones independentistas que apoyaron cientos de manifestantes.
En cuanto a los resultados prácticos de la visita, el Ejecutivo emitió un comunicado en el que señala que el gobernador recabó el compromiso y apoyo del presidente Obama para adelantar los trabajos relacionados al estatus.
En materia de seguridad pública, también se discutieron los esfuerzos de colaboración entre el gobierno puertorriqueño y el gobierno federal en la lucha contra el crimen.
Puerto Rico ha realizado varias consultas sobre el estatus, en 1967, 1993 y 1998, con el resultado de un rechazo a la opción de convertirse en un nuevo estado de los Estados Unidos.
Puerto Rico es territorio estadounidense desde el fin de la guerra con España en 1898 y, durante más de medio siglo, ha sido un Estado Libre Asociado que recibe fondos del Gobierno federal pero no paga impuestos federales.