Aviones no tripulados están de moda, pero existen preocupaciones sobre privacidad y seguridad de las personas
Washington.- Atención: Los aviones no tripulados (o Drones) se ponen de moda.Los primos de uso civil, del tipo de aeronave no tripulada del ejército que ha rastreado y eliminado terroristas en el Medio Oriente y en Asia, empiezan a tener una gran demanda por departamentos de la Policía, patrullas fronterizas, compañías eléctricas, organizaciones de noticias, entre otros que quieren tener una vista de pájaro, la cual es muy impráctica y peligrosa de conseguir utilizando aviones convencionales o helicópteros.Junto con el entusiasmo, también vienen los reparos. Al tener Drones navegando en el cielo se podría invadir la privacidad de las personas. Al gobierno le preocupa que puedan colisionar con aviones de pasajeros o que puedan venirse abajo y estrellarse, tales preocupaciones han frenado la tan generalizada adopción de semejante tecnología.
Sin embargo, la presión está creciendo para otorgar a los drones el mismo acceso al cielo nacional que cualquier otra aeronave tripulada.
“Será la próximo gran revolución de la aviación. Y será un hecho”, dijo Dan Elwell, vice-presidente de la Asociación de Industrias Aeroespaciales para la aviación civil.
Entusiasmo militar
Cierto ímpetu viene por parte del ejército, quien traerá drones a casa desde Afganistán y quiere cierto espacio para probarlos y hacer uso de ellos. En diciembre, el Congreso otorgó a la Administración Federal de Aviación (FAA por sus siglas en inglés) seis meses para escoger una media docena de sitios alrededor del país donde el ejército y otras organizaciones puedan lanzar aeronaves no tripuladas en las inmediaciones del tráfico regular aéreo con el propósito de demostrar que tales aeronaves son seguras.
El Departamento de Defensa dice que la demanda de drones y de sus misiones en expansión requiere de acceso rutinario y sin restricciones al espacio aéreo doméstico, incluyendo alrededor de los aeropuertos y en las ciudades.
Otras dependencias de gobierno quieren también poder volar drones, pero han sido retenidas por las prohibiciones de la FAA al menos que primeramente reciban un permiso por cada caso. Poco menos de 300 permisos se encontraban activos para finales del 2011, y usualmente incluyen restricciones que limitan severamente el uso de los vuelos. Los negocios que quieren poner a trabajar drones tienen muy poca suerte; los permisos son sólo otorgados a las dependencias de gobierno. Pero eso está cambiando.
El Congreso ha dicho a la FAA que la dependencia debe permitir el vuelo de drones militares y civiles en el espacio aéreo civil para septiembre del 2015. En la primavera, la FAA estará dispuesta a tomar el primer paso al proponer nuevas reglas que permitan el uso limitado de pequeños drones comerciales por primera vez en la historia.
“Lo que nos preocupa es de que debemos hacer esto de una manera ordenada y segura y encontrar el balance apropiado entre todos los usuarios en el sistema”, dijo Michael Huerta, actual administrador de la FAA, recientemente en un almuerzo en Washington con las industrias. “Primero terminemos el desarrollo de estos seis sitios âalgo que estamos dispuestos a hacerâ donde podamos obtener mayor información, podamos hacer más pruebas y conocer más de la historia de como estas cosas realmente funcionan”.
Todos quieren el suyo
Los drones vienen en todos los tamaños, desde el Global Hawk de alto vuelo, con sus alas que tienen una extensión de 116 pies, hasta el drone parecido a un colibrí, que pesa menos que una batería doble-A, y que puede posarse en el filo de una ventana para grabar sonido y video. Lockheed Martin ha desarrollado una semilla de hoja de arce falso, o “pájaro desenfrenado”, equipado con sensores de imagen y que pesa menos de una onza.
Los potenciales usuarios civiles son tan variados como los mismos drones. Las compañías eléctricas los quieren para monitorear líneas de transmisión. Los granjeros los quieren para volarlos sobre los campos y detectar cuales cultivos necesitan agua. Los ganaderos los quieren para contar su ganado.
Los periodistas están explorando el potencial de los drones en la recopilación de noticias. La FAA está investigando si The Daily, una publicación digital de Rupert Murdochâs News Corp., usó drones sin permiso para capturar imágenes aéreas de las inundaciones en Dakota del Norte y Mississippi el año pasado. En la Universidad de Nebraska, el profesor de periodismo, Matt Waite, ha iniciado un laboratorio para que los estudiantes experimenten con el uso de un pequeño helicóptero a control remoto.
“¿Se puede hacer la cobertura de noticias con un drone? Creo que la respuesta es que sí”, dijo Waite.
Aún hay restricciones
Al igual que otras agencias, los departamentos de Policía deben obtener permisos de la FAA y apegarse a las mismas reglas de los aficionados a los modelos de aviones de control remoto: Los drones deben pesar menos de 55 libras, mantenerse a una altitud menor a los 400 pies, mantenerse alejados de los aeropuertos y siempre estar a la vista del operador.
Inclusive el drone más pequeño podría ser una “enorme amenaza” para un avión de gran escala, dijo Dale Wright, director de departamento de seguridad y tecnología de la Asociación Nacional de Controladores de Tráfico Aéreo. “Si un gran avión lo succiona hacia el interior de una de sus turbinas, es muy probable que la turbina se descomponga”, dijo. Si golpea un avión pequeño podría hacerlo estrellar”.
Fuente y Foto: Associated Press.