¿Aumenta el deseo sexual en verano?, la ciencia responde
El verano es una época del año que muchos asocian con el descanso, la relajación y el disfrute. Pero, ¿es cierto que también aumenta el deseo sexual durante esta estación? La ciencia ofrece respuestas interesantes a esta pregunta. Diversos factores como la reducción del estrés, el aumento de la exposición solar y la mayor cantidad de tiempo libre pueden influir en la libido.
Sin embargo, el calor extremo puede tener el efecto contrario. Exploramos cómo el ambiente veraniego puede afectar el deseo sexual y ofrecemos recomendaciones para mantener la chispa en la pareja, incluso en los días más calurosos.
Factores que aumentan el deseo sexual en verano
El verano trae consigo una serie de cambios en la rutina diaria que pueden propiciar un aumento del deseo sexual.
Según diversos sexólogos, el descanso y la relajación que caracterizan a las vacaciones juegan un papel crucial. La reducción del estrés laboral y el aumento de actividades de ocio mejoran el estado de ánimo, lo que a su vez puede incrementar la libido.
Otros factores importantes que hay que tener en cuento son el cambio de escenario y la ruptura de la rutina. La posibilidad de vestirse de manera más seductora y disponer de más tiempo para cuidar la relación de pareja puede reavivar la intimidad y la ternura.
La exposición al aire libre y a la luz solar tiene efectos positivos en el ánimo. Estar más tiempo al aire libre reduce los niveles de estrés y aumenta la sensación de felicidad, creando un ambiente propicio para el deseo sexual. La luz solar también ayuda a la asimilación de vitamina D, que eleva las hormonas como la testosterona, directamente implicada en la respuesta sexual.
Cómo contrarrestar los efectos negativos del calor
Aunque el verano puede aumentar el deseo sexual, las altas temperaturas pueden tener el efecto contrario. El calor extremo puede causar bajadas de tensión, cansancio y sudor excesivo, factores que pueden inhibir la libido. La sexóloga Rosa Navarro sugiere varias estrategias para mantener la chispa en la pareja a pesar del calor. Buscar lugares frescos en la casa, usar ventiladores de manera erótica o disfrutar de momentos de pasión en la ducha o la bañera son algunas de las recomendaciones. También se pueden utilizar elementos como hielo, geles y lubricantes con efecto frío, o incluso juguetes eróticos que se puedan enfriar.
Otros aspectos básicos que se pueden ‘trabajar’ es potenciar el erotismo a través de caricias mientras se aplica el protector solar, o jugar de manera seductora en presencia de otras personas. Disfrutar de comidas exquisitas, siestas y abrazos también puede contribuir a mantener la conexión en la pareja. Lo importante es aprovechar al máximo el tiempo libre y la predisposición a disfrutar que ofrece el periodo vacacional.
Fuente: https://www.larazon.es/