Atletismo español sacudido por operación antidopaje
Madrid.- La mera sospecha de una implicación de Marta Domínguez, la mejor atleta española de todos los tiempos, cuyo domicilio en Palencia ha sido registrado hoy por la Guardia Civil en el marco de una operación antidopaje, constituye un golpe en la línea de flotación del atletismo español.Campeona mundial de 3.000 metros obstáculos, dos veces subcampeona del mundo de 5.000 metros y otras tantas campeona de Europa, Marta Domínguez disfrutaba hasta hoy de una reputación inmaculada que llenaba de orgullo a todo el atletismo y al deporte español en general.
El 4 de noviembre pasado Marta Domínguez anunció que estaba embarazada y añadió su intención de regresar a la competición a tiempo para participar en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, donde espera conquistar la única medalla que se le resiste.
El panorama ha cambiado radicalmente con la noticia de que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha registrado, entre otros, el domicilio de Marta Domínguez en Palencia, además de otros en Madrid y Las Palmas pertenecientes a deportistas, entrenadores y médicos, según fuentes de la investigación.
Según la edición digital de El País, entre los investigados están, además, el médico canario Eufemiano Fuentes, también implicado en la Operación Puerto; el entrenador de Marta, César Pérez, y el técnico Manuel Pascua Piqueras, de larga tradición en el atletismo español. Los tres han sido detenidos en el curso de la denominada operación ‘Galgo’.
Junto a su condición de mejor atleta española de todos los tiempos, reconocida de forma unánime, Marta Domínguez desempeña el cargo de vicepresidenta de la Federación Española de Atletismo, nombrada por el titular, José María Odriozola.
La Federación, consultada por EFE, ha declinado hacer ningún comentario sobre el caso.
La investigación sobre Marta Domínguez se produce cuando otro de los atletas españoles emblemáticos, el marchador Paquillo Fernández, cumple sanción por posesión de productos dopantes, lo que añade descrédito a un deporte español hasta hoy envidiado en todo el mundo.
La atleta palentina logró el mayor éxito de su carrera el 17 de agosto del 2009, exactamente un año después de que en la final de los Juegos de Pekín tropezara con el penúltimo obstáculo y se fuera al suelo en plena final olímpica.
Ese día, en el estadio Olímpico de Berlín, Domínguez se colgó la medalla de oro de los 3.000 metros obstáculos con un nuevo récord de España y la mejor marca mundial del año (9:07.32).
Marta Domínguez se ganó a pulso una reputación de atleta aguerrida, valiente, capaz de batirse con las mejores del mundo, dotada de una especial habilidad para ajustar su forma física al día de los grandes campeonatos de cada año. De ese modo ha ido coleccionando medallas durante 16 años.
Desde que en 1993 logró en San Sebastián (España) el título europeo júnior de 1.500 metros, Marta ha triunfado en las grandes ocasiones excepto en los Juegos Olímpicos. Su única final, en tres ediciones, fue la de obstáculos en Pekín (en Atlanta’96 cayó en series de 1.500 y Sydney 2000 en las de 5.000), pero aún no descarta llegar hasta Londres 2012, cuando tenga 35 años.
Los Mundiales, por el contrario, se le han dado bien. Los de Berlín eran los sextos para la palentina, que ha ganado dos medallas de plata en 5.000 (Edmonto 2001 y París 2003) y ha estado en otras dos finales (novena en Sevilla’99 y decimocuarta en Helsinki 2005, ambas en 5.000).
A lo largo de su dilatada carrera Marta Domínguez ha ido encontrando motivación en el cambio de distancia y de especialidad, compitiendo con éxito en distancias comprendidas entre los 1.500 y el medio maratón.
Su paso a los 3.000 m. obstáculos parecía una apuesta dudosa, pero ya en Pekín, con apenas un año de entrenamiento, demostró que podía estar arriba con las mejores.
Después de ganar en París 2003 su segunda plata en unos Mundiales, tuvo un breve bache en su carrera entre los años 2004, en que no compitió en los Juegos de Atenas por lesión, y 2005, en que sólo fue decimocuarta en los Mundiales de Helsinki, pero un año después regresó en los Europeos de Gotemburgo con su segundo título consecutivo en 5.000.
En los Juegos de Sydney 2000, una gripe le impidió clasificarse para la final olímpica.
Domínguez es el último producto de la escuela palentina que ha dado atletas como Mariano Haro, Santiago de la Parte, Isaac Viciosa, Ana Isabel Alonso, los hermanos Cándido y Javier Alario, Angelines Rodríguez y Dolores Rizo, entre otros.
Aficionada al fútbol, se dio a conocer en el atletismo al proclamarse campeona de Europa júnior de 1.500 en San Sebastián’93 y un año después logró la medalla de plata en los Mundiales júnior de Lisboa.
En aquella carrera de Lisboa empezó a lucir en la cabeza la ahora famosa cinta que le había regalado poco antes su abuela y con la que, convertida en su amuleto, compite desde entonces.