Así se usa el cinturón de seguridad

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Que el cinturón de seguridad es un elemento clave para el bienestar de los ocupantes de un vehículo es algo que, teóricamente, todo el mundo sabe. Igual que teóricamente todo el mundo lo usa (spoiler: no) y sabe cuál es su correcto funcionamiento.

La realidad es que las multas por no llevarlo puesto son muchas y, además, quienes lo llevan colocado, en muchas ocasiones no se lo han puesto de la manera correcta.

La pregunta parece fácil, sobre todo teniendo en cuenta las tres posibles respuestas que da el organismo: A) Muy ajustado, aunque apriete, para que sujete mejor; B) Flojo y con holgura, para llegar bien a todo el habitáculo del vehículo; y C) Ajustado al cuerpo, ni apretado ni flojo, y no retorcido.

Claramente es la tercera opción, pues debe sujetar con firmeza el cuerpo, pero tampoco debe apretar hasta el extremo a quien lo usa; y también por el detalle de la importancia de que no esté retorcido, porque entonces pierde eficacia.

Además, hay que destacar que en el caso indicado por la repuesta ‘B’, que el cinturón esté más holgado de lo que debe es, junto a una mala posición en el asiento, una de las causas de que se provoque el “efecto submarino”, en el que en caso de accidente el cuerpo del ocupante se desliza contra el salpicadero o volante, pudiendo provocar lesiones graves.

Fuente: https://www.autobild.es/