Alfa 40/60 HP Castagna Aerodinamica: el auto pionero de la aerodinámica

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Hoy, el principio básico de todo automóvil es tener el mayor nivel aerodinámico en el exterior, algo que no sucedía en los principios de la historia de la industria automotriz, sin embargo, a principios de la década de 1910 surgió un modelo que se adelantó a su época por el diseño de su carrocería: el Alfa 40/60 HP.

Creado para aquellos que querían más prestaciones que las que ya ofrecía el Alfa 10 HP, el Alfa 40/60 HP, lanzado en 1913, fue pionero en demostrar las ventajas de la aerodinámica en un automóvil.

Realizado en aluminio y con una forma de gota de agua, algo similar a los actuales monovolúmenes, este auto se valía de su línea aerodinámica para ofrecer mayores prestaciones.

¿Cómo surge este peculiar auto?

Tras el éxito de los primeros modelos lanzados en 1910, Alfa se aventuró en desarrollar un modelo de mayores prestaciones que el Alfa 24 HP, que constituía su tope de gama en aquella época. Fue así que nació el 40/60 HP.

Diseñado por Giuseppe Merosi, esta variante que se trataba de todo un auto deportivo destacaba por su carrocería de tipo Torpedo, la longitud de 3.2 metros de longitud, la ausencia de parabrisas, la parrilla vertical delantera y el largo cofre.

Para su alto desempeño, este Alfa 40/60 HP equipaba un motor de cuatro cilindros en línea de 6.0 litros que desarrollaba una potencia de 70 caballos de fuerza y alcanzaba una velocidad máxima de 125 Km/h. Todas cifras eran superiores para su época.

Con esta base se creó la versión Corsa, pensada para las carreras. Capaz de alcanzar los 137 km/h con un grupo motopropulsor de 137 caballos de fuerza, este auto logró victorias de prestigio después de la Primera Guerra Mundial, como las que consiguió Giuseppe Campari en Mugello en 1920 y 1921.

¿De dónde proviene el “Siluro Ricotti” o Alfa 40/60 HP Castagna Aerodinamica?

Entusiasmado por las prestaciones de este automóvil, el Conde Mario Ricotti no dudó en adquirir un chasis del Alfa 40/60 HP para un encargo muy especial en el que iba a necesitar, además, la colaboración del famoso carrocero Castagna.

Además de ser un aficionado de los autos, el conde también amaba la vida en el campo y poseía una casa en el Piamonte, a la que quería acudir con un automóvil hecho a la medida de sus necesidades.

Así, entregó un pliego de condiciones que parecía una mezcla entre la cuadratura del círculo y la definición de un monovolumen: su Alfa 40/60 HP debía tener cinco plazas en lugar de dos, para trasladar cómodamente a su familia e invitados, tener un espacio amplio y resguardado para el equipaje, ser manejable y mantener las prestaciones del modelo original.

Como solución a este reto se creó el “Siluro Ricotti” (Torpedo Ricotti) o Alfa 40/60 HP Castagna Aerodinamica. Un peculiar automóvil que prefigura rasgos de los monovolúmenes, pero conserva aspectos que le acercan a los carruajes. Con el fin de oponer la menor resistencia posible al aire, se eligieron formas fluidas y suaves hasta lograr una silueta parecida a la de una lágrima. Asimismo, para aligerar el peso y conservar la maniobrabilidad y la potencia de este automóvil, se optó por el aluminio.

Además del vanguardista diseño, este vehículo único disponía de tres puertas laterales: dos ubicadas a la derecha y una a la izquierda. Mientras que una puerta adicional permitía acceder al motor. Para poder ver lo que había en el exterior, se abrieron tres ventanas redondas a ambos lados y una luneta posterior de forma triangular. Por su parte, el puesto del conductor, cuyo puesto estaba alejado del frontal, disponía de un amplio parabrisas panorámico. Su único inconveniente: era demasiado caluroso en verano.

Este Siluro Ricotti fue clave para introducir y afianzar la presencia de una ciencia tan novedosa como la aerodinámica en el mundo del automóvil. Con todas sus modificaciones internas y externas, podía alcanzar casi 140 Km/h y adelantar al Alfa 40/60 HP Corsa, la versión deportiva del modelo.

Fuente: https://mexico.as.com/