Alergia ocular, una afección temporal asociada con las estaciones
La alergia en los ojos, también llamada conjuntivitis alérgica, es muy común en los primeros meses del año. Ocurren cuando los ojos reaccionan a algo que los irrita (llamado alérgeno).
Esto es lo que se conoce como respuesta de hipersensibilidad, que puede ser inmediata o tardía.
Los ojos producen una sustancia llamada histamina que sirve para combatir el alérgeno. Asimismo, los párpados y la conjuntiva se vuelven rojos, se hinchan y producen picazón.
La doctora Ariela López, oftalmóloga de los Centros de Diagnóstico, Medicina Avanzada y Telemedicina (Cedimat), asegura que los ojos pueden lagrimear y arder y que, a diferencia de otros tipos de conjuntivitis, la alergia en los ojos no es contagiosa.
La especialista asegura que las personas con respuestas inflamatorias en la superficie ocular pueden cursar con afección corneal y palpebral. En algunas ocasiones suele enmascararse con la blefaritis y estar acompañada de ojo seco, lo que constituye todo un reto para el tratamiento.
Una alergia ocular también puede cursar con el tipo nasal, picazón, congestión y estornudos. En general, es una afección temporal asociada con las alergias estacionales, explica.
Algunas causas
La alergia en los ojos puede contraerse por el pelo de las mascotas, el polvo, el polen, el humo, los perfumes o, incluso, los alimentos. Si no puede evitar el desencadenante, la alergia puede ser más grave.
Es importante identificar el agente causante, de lo contrario, la alergia puede empeorar.
Manifestaciones alergia
Una alergia se produce cuando el sistema inmunitario reacciona a un alérgeno que normalmente es inofensivo, insiste y señala que cuando un alérgeno entra en contacto con los ojos, ciertas células en el interior del ojo liberan histamina y otras sustancias para combatir el alérgeno.
Esta reacción hace que los ojos se enrojezcan, piquen y lagrimeen. Los alérgenos en el aire, tanto en lugares cerrados como al aire libre, provocan muchas alergias en los ojos. Estos alérgenos incluyen:
Polen del césped, los árboles y la ambrosía, polvo, caspa de las mascotas, moho y humo.
Las reacciones alérgicas a perfumes, cosméticos o fármacos también pueden hacer que los ojos tengan una reacción alérgica.
Algunas personas pueden ser alérgicas a los conservantes químicos en las gotas lubricantes para ojos o en gotas recetadas. En este caso, deben usar gotas sin conservantes de ser posible, recomienda la médica.
“A veces, los ojos pueden reaccionar a otros alérgenos que no entran en contacto directo con el ojo necesariamente, como algunos alimentos, mordeduras o picaduras de insectos”, analiza López. Así mismo, asegura que si dos de los padres sufren de alergia es más probable que los hijos la tengan.
Diagnóstico
Para brindar un tratamiento adecuado, el oftalmólogo es el único especialista con la capacidad y herramienta necesaria para hacer un diagnóstico certero en el ojo, asegura.
Sobre el tratamiento, López especifica que la clave para tratar la alergia en los ojos es de vital importancia que sea en conjunto con un alergista, si bien es cierto que la alergia tiene una predisposición genética, es fundamental evitar o limitar el contacto con la sustancia que provoca el problema, afirma.
Para esto, debe saber cuál es la sustancia a evitar. Un alergista puede tomarle una prueba de piel o sangre para identificar los alérgenos específicos.
Evitar los alérgenos
Si es alérgico al polen, evite estar al aire libre lo más posible cuando la concentración de polen esté en su punto más alto.
La concentración de polen suele ser más alta a la mitad de la mañana y al atardecer. Además, evite estar afuera cuando el viento sople polen. Cuando esté al aire libre, los lentes de sol o las gafas pueden evitar que le entre polen en los ojos.
Recomendaciones
La oftalmóloga recomienda mantener las ventanas cerradas y usar aire acondicionado, tanto en el automóvil como en la casa. Esto ayudará, explica, a disminuir su exposición al polen y a otros irritantes.
También recomienda, no usar ventiladores de ventana, ya que traen polen y otros alérgenos de afuera.
Mantener las unidades de aire acondicionado limpias, de manera que no permitan el ingreso de alérgenos.
Si el moho es un disparador de alergia, la humedad alta puede fomentar el crecimiento de moho. Recomienda mantener el nivel de humedad de la casa entre un 30 % y un 50 %.
Limpiar con frecuencia los espacios de mucha humedad, como el sótano, el baño y la cocina. Se debe considerar el uso de un deshumidificador, en lugares particularmente húmedos, como un sótano.
“Si el polvo de la casa le genera conjuntivitis alérgica, intente mantener los ácaros del polvo lejos de la piel. Preste especial atención a su habitación”, recomienda. Pide, además, usar ropa de cama antialérgica, especialmente las fundas de almohadas.
Lave la ropa de cama con frecuencia con agua caliente, a una temperatura de al menos 130 grados. Al limpiar los pisos, use un mapo o un trapo húmedo en lugar de un mapo seco o una escoba; de esta manera, atrapará los alérgenos.
Si las mascotas le dan alergia, intente mantener los animales fuera de la casa lo máximo posible. Es muy importante no permitir que la mascota entre a su habitación, para así poder dormir en una habitación libre de alérgenos.
Gotas y medicamentos
El principal tratamiento comprende la de evitar de los alérgenos.
Las compresas frías y lágrimas artificiales ayudan a aliviar la alergia en los ojos al eliminar temporalmente los alérgenos de los mismos.
También lo alivian si tiene los ojos secos e irritados brindándoles humedad, esas se pueden usar sin receta médica, hasta seis veces al día.
Los que disminuyen el enrojecimiento
Los descongestionantes disminuyen el enrojecimiento en los ojos producto de la alergia. Están disponibles como gotas para los ojos sin receta médica.
Si las gotas para ojos descongestionantes que eligen tienen un antihistamínico, pueden aliviarle también la picazón.
No debe usar este tipo de gotas para ojos durante más de dos o tres días. El uso prolongado empeora los síntomas de irritación. Los antihistamínicos orales pueden aliviar un poco la picazón.