Aeropuertos de República Dominicana: piezas clave para una red logística de calidad mundial (2/4)
Por su ubicación geográfica, en el mismo corazón del Caribe, República Dominicana tiene una posición privilegiada como punto de destino y origen de millones de visitantes que eligen nuestro país tanto para sus viajes de negocios como por motivos vacacionales.
Asimismo, su estratégica posición lo convierte en el perfecto punto comercial entre Europa y Norte, Centro y Sur América, ya que le permite tener un mejor acceso internacional y ofrecer un mejor y más rápido servicio a cualquier parte del mundo.
Gracias a su entorno político, las empresas y la competitividad macroeconómica, además de la globalización, y a su infraestructura de aeropuertos, puertos y carreteras, nuestro país es el más importante centro potencial de comercio en toda la región del Caribe.
Esto se evidencia con los logros atribuibles al desarrollo del turismo, los cuales son justamente compartidos por las atracciones naturales de esta tierra, la hospitalidad de su gente, que es comprobada por todos nuestros visitantes, y lo que es muy importante, el ambiente de seguridad que percibe quienes nos visitan, ya sea para sus vacaciones o en interés de invertir.
Los que vienen de vacaciones, encuentran la más completa variedad de destinos dentro de una sola isla, incluyendo increíbles playas de aguas cristalinas, campos de golf de renombre internacional, centros culturales, una diversa oferta hotelera que incluye desde hoteles boutique hasta hoteles todo incluido, spas, vida nocturna, casinos, centros comerciales y restaurantes.
Para aquellos que vienen a invertir, República Dominicana es el país más favorable en términos de ambiente de negocios, ya que le brinda potenciales oportunidades de inversión, le ofrece seguridad, desarrollo tecnológico, un clima ideal para inversiones, un tratamiento justo y equitativo, y muchos incentivos fiscales que motivan cada vez más a centenares de extranjeros hacer de este país su nueva casa.
Respecto al sector aeroportuario, podemos decir, sin temor a equivocarnos, que tenemos un sistema aeroportuario de calidad mundial, remozado y adecuado tanto en su infraestructura como en el servicio que se brinda. Contamos con una de las redes aeroportuarias más completas de Latinoamérica, ya que, en tan sólo 48 mil kilómetros cuadrados de superficie, tenemos ocho aeropuertos internacionales de calidad mundial, cinco, de propiedad estatal, operados bajo el esquema de concesión, y tres, de propiedad privada, con el correspondiente permiso de explotación comercial. Esta red se complementa con cinco aeropuertos domésticos estatales, distribuidos estratégicamente para interconectar el territorio nacional con los principales puntos turísticos.
De acuerdo a los indicadores del Reporte Mundial de Competitividad en Viaje y Turismo, para el año 2017, de un total de 136 países, nuestro país ocupó la posición 50 respecto a la calidad de la infraestructura aérea. La inversión del sector privado en este tipo de infraestructuras ha sido decisiva en el desarrollo del país, favoreciendo al crecimiento turístico y facilitando las condiciones para el desarrollo económico y social, por la vía de las mejoras en la productividad y de la competitividad.
Es importante señalar que el 95% de nuestros visitantes lo hacen por vía aérea, por lo cual cobra mucha más importancia la actividad aeroportuaria. El 97% de estos pasajeros corresponden a vuelos internacionales, ya que, por las cercanías de nuestras distancias internas, el transporte doméstico no es significativo.
Se estima que, de este tráfico, el 45% son turistas de una amplia gama de nacionalidades, que utilizaron una gran variedad de empresas aéreas, las cuales nos comunican perfectamente en línea directa con varios puntos de Norte, Centro y Sur América, varios puntos de Europa, e indirectamente con el resto del mundo.